Te contamos los detalles detrás de lo que fue otra actuación del único grande.
Boca Juniors derrotó a Talleres por 2-1 en Córdoba y culminó su pretemporada ganando ambos encuentros que disputó. Los tantos del Xeneize en esta noche los marcaron Luca Langoni y Nicolás Figal. Ahora el equipo de Diego Martínez tendrá una semana para preparar el debut oficial en la Copa de la Liga Profesional 2023.
Fue un partido intenso para Boca contra un rival que será de los animadores del próximo torneo. Desde el arranque se notó una diferencia clara con respecto al primer amistoso en ese sentido, porque tanto Talleres como el Xeneize salieron a presionar alto, provocando mucha fricción y faltas por intentar recuperar de manera agresiva la pelota.
Boca, que sólo tuvo el ingreso de Lucas Blondel por un tocado Luis Advincula, tuvo una primera parte correcta y pareja ante Talleres. Ambos equipos tuvieron sus ocasiones, pero mientras que los de Córdoba sólo las forzaron con remates de media distancia que Chiquito Romero resolvió de gran manera, el Xeneize logró hacerlo con más profundidad y lastimando adentro del área.
En las tres situaciones de Boca hubo participación de Juan Ramírez, que si bien no la rompió, fue importante en ese sentido. El volante le tiró un centro bárbaro a Langoni, que por nada no pudo rematar. También fue quien mejor le dio pase con ventaja a Saracchi, para que desborde y tire dos pases atrás sensacionales, que primero Bullaude desperdició de manera increíble, pero que luego Luca, en un tercer rebote tras dos chances fallidas del ex Godoy Cruz, no perdonó y que terminó en el 1-0. El pibe lo celebró con furia, sacándose la mufa tras varias lesiones musculares que han cortado su gran explosión.
En el complemento Talleres salió con otra actitud, con cambios y tuvo una ocasión muy clara que forzó Sosa con un desborde que Rodríguez, de manera increíble, estalló en el travesaño a dos metros del arco. Luego vino un error tras un lateral, Saracchi cometió un penal tonto y Bustos – con gran ejecución – puso el 1-1 superando a Chiquito Romero.
En el medio de todo eso Martínez puso a Cavani y Janson, sacando a Langoni y Bullaude, pasando el 4312 a un 4212. Eso desarmó al equipo y por eso Talleres tuvo esas chances y otra más muy clara, en la que Bustos perdió en el pie a mano con Chiquito Romero. El entrenador reparó el error, acomodó un poco mejor el mediocampo y cerró los cambios con los ingresos de Saralegui, Benedetto, Weigandt y Fabra, quienes suplieron a Ramírez, Merentiel, Saracchi y Blondel.
El partido entró en una meseta, pero Boca lo terminó ganando en una pelota parada que Pol Fernández ejecutó muy bien y que Nicolás Figal, con un gran cabezazo cruzado, superó a Herrera para poner el 2-1 con el que se terminó el duelo.
Futbolísticamente a Boca le costó más y sintió la ausencia de sus titulares por lesión y convocatoria. El contexto de la pretemporada y el duro rival, que hizo las veces de local pese a la gran presencia de público del Xeneize, permiten que la mirada sea un poco más permisiva. Habrá que ver cuánto aporta Zenón en el juego cuando se sume el lunes y si llega algo más en el mercado.