El capitán de Boca Juniors demostró ser un diez también afuera de las canchas al haber ido a la cena solidaria del club que organizó junto a Unicef. En medio de la misma, se tomó un tiempo y realizó declaraciones.
Fue el que más tardó en poder sentarse en la mesa a comer por estar firmando cientos de aútografos y sacándose otros tantas fotos, también fue el último del plantel en irse de la segunda cena solidaria de Boca junto a Unicef. Juan Román Riquelme se entregó al 100% para colaborar con la ayuda benéfica que organizó el club para ayudar a la gente carenciada. En el medio, jugó para su equipo, y como capitán, declaró para romper contra tantas críticas recibidas por el partido con Belgrano y por el arbitraje de Carlos Maglio:
Creemos que debimos haber ganado más fácil. Si expulsaban al arquero de ellos en el penal, no hubiera pasado todo lo que pasó después. Esto que pasó va a seguir pasando. Ahora que sólo hay hinchas locales, si un árbitro toma una decisión la gente grita y reclama. Los que más expuestos quedan son ellos, los árbitros. Insisto: si el árbitro echaba a Olave, Boca ganaba fácil y Belgrano no llegaba más.
Del partido en si mismo contra el Pirata, Román dijo:
Cada partido para nosotros es muy importante. Esperemos seguir sumar de a tres.
Por último, Riquelme se refirió a las grandes muestras de cariño que la gente en todo el país le viene demostrando a los jugadores:
Somos el equipo más grande del país. Tenemos mucha suerte que a los hace más tiempo que estamos acá, cuando vamos al interior nos tratan muy bien. La gente está contenta, nosotros también. Es una obligación responderle a la gente, los hinchas de Boca nos tratan muy bien. Les quiero mandar un beso a todos ellos.