
El equipo de los Barros Schelotto abrió el año con una actuación que mantiene la esperanza. Ricardo Centurión brilló utilizando la 10 que dejó el Apache.
Boca Juniors demostró en este 2017 que tiene funcionamiento y jugadores para sostener el nivel que demostró a fines del año pasado. Sin Carlos Tevez, fue Ricardo Centurión quien llevó el histórico 10 en la espalda y el peso del partido. El delantero se paró atrás de Walter Bou y fue el eje de un 2-0 contundente frente a Estudiantes de La Plata en Mar del Plata.
Centurión aportó el desequilibrio y Gago el orden. El 10 y el 5 fueron el eje de un Boca que mantuvo el 4231 como esquema. Guillermo aprobó esa jugada de poner a Ricky como Tevez y a Solís como extremo que tantas dudas despertó en la previa del partido. Más allá de la labor del entrenador, hay que volver a resaltar el desempeño de la dupla creativa del Xeneize, que se juntó con un pase de primera de Pintita para que el ex San Pablo apile rivales con la cancha de frente y genere el gol en contra de Diarte que abrió el encuentro.
Ya con el marcador abierto apareció lo mejor de Boca: posesiones, llegadas y mucha superioridad. Rápidamente una buena apertura de Pablo Pérez encontró solo a Nazareno Solís, que con un gran centro de zurda asistió a Walter Bou para que él le rompa el arco a Mariano Andújar con un testazo brutal. La impotencia del arquero de Estudiantes se juntó con los silbidos que recibió de los hinchas del Xeneize en cada una de las pelotas que tocó, teniendo una noche para el olvido luego de decirle que no al tras paso al azul y oro.
Axel Werner no tuvo mucho trabajo, pero en cada uno de los avances hacia el arco demostró solidez y seguridad. El joven arquero se muestra mucho más aplomado y confiado, aún con la enorme cantidad de rumores que han circulado y seguirán apareciendo sobre el posible refuerzo para el puesto del cual hoy es dueño.
En el complemento Boca pudo haber estirado el marcador, pero Centurión al palo, Bou errando abajo del arco y Pavón fallando en un pie a mano no lograron convertir las jugadas claras que se crearon. En esta etapa hubo acciones que quedaron para el color: Umeres vio la roja por doble amarilla para Estudiantes pese a ingresar pocos minutos, Peruzzi asustó a todos al salir con una molestia que solo fue un calambre, Tobio pegó una patada insólita que mereció una expulsión que no llegó, y el debut absoluto de Mauro Luna Diale (categoría 1999) en la primera del azul y oro.
El próximo partido del Xeneize será el martes (22.10), cuando el equipo se mida con San Lorenzo buscando quedarse con este triangular que se desarrolla en Mar del Plata. Esta noche quedó en claro que Boca tiene en el funcionamiento su mejor refuerzo con el que podrá soñar con ser campeón.

Daniel
22 enero, 2017 at 02:32
Boca jugo bien en general pero Estudiantes jugó para el ojete y creo que también ayudó eso. Lo que no me gusta y aun en los partidos que goleamos es que o en vez de hacer muchos mas goles de los que hicimos en algunos partidos del campeonato el equipo se dedico a boludear o a perdonar al rival y con Estudiantes la transicion defensa ataque fue rapida, pero la definicion fue mala y era para hacerles 4 goles ese una de las cosas a mejorar la punteria para no dejar el partido abierto.