¡Triunfo de oro en La Plata!

Te contamos los detalles detrás de lo que fue otro encuentro del único grande.

Boca Juniors derrotó por 2-1 a Estudiantes en La Plata y sumó un triunfo de oro. Fue de manera agónica y por medio de un penal ejecutado por Miguel Merentiel. El anterior tanto lo hizo Exequiel Zeballos, quien falló un disparo desde los doce pasos, pero que fue el mejor jugador del equipo una vez más. De esta manera, el azul y oro consigue un resultado clave de cara al Superclásico del fin de semana.

Para este partido Úbeda apostó al ingreso de Exequiel Zeballos por Williams Alarcón por decisión táctica, posicionando a su vez al Chango por izquierda. También puso a Tomás Belmonte por el sancionado Leandro Paredes. El equipo salió a jugar un duelo serio en La Plata, sabiendo la importancia de este resultado y que se enfrentaba a un rival duro.

El desarrollo del encuentro fue trabado y con Boca siendo levemente superior. Lo fue por Zeballos, que con su gambeta y capacidad de engañar generó varias ocasiones. Su peso individual superó al colectivo, porque la verdad es que sus compañeros de ataque no tuvieron una buena primera parte, haciendo que el rendimiento del siete se destaque por demás.

Justamente Zeballos fue protagonista del período, porque sobre el cierre del mismo se inventó una gambeta que dejó pagando al primer central de Estudiantes, quien terminó bajándolo con un tacle dentro del área. Lamentablemente, pese a que el Chango engañó al arquero, su remate fue muy ancho y terminó pegando en el palo.

El miedo en el complemento pasaba por si ese penal afectaría a Zeballos en su confianza, pero esto afortunadamente no pasó. De hecho, el Chango terminó siendo decisivo al aprovechar un gran pase de Milton Giménez que, con su zurda, la clavó abajo con un fierrazo cruzado para el 1-0. El tanto fue espectacular, porque se junto la individualidad del 7 y el 9 con lo colectivo, destacándose un taco previo de Carlos Palacios y una buena salida desde el fondo de la defensa.

Era el momento para ser inteligentes y lastimar ante la desesperación de Estudiantes, pero una vez más este equipo cayó en la estupidez y, con una mala salida abajo de Marchesín, llegó el penal con el que Cetré puso el 1-1. Ahí llegaron los cambios en Boca, con los ingresos de Advincula, Herrera y Braida, quienes suplieron a Giménez, Barinaga y Palacios. También se cambió el esquema, que pasó de un 442 a un 451 con Merentiel como única referencia.

Ahí, en ese lapso, pasó el peor momento de Boca en el partido. Ellos a pura pelota y centro cruzado generaron sus únicas acciones, con un par de cabezazos desviados de Núñez y un taconazo de Palacios que pegó en el techo del travesaño. Pero, cuando parecía que se complicaría, la inteligencia de Ander se hizo presente. El volante generó la roja de Neves, una que forzó quedándose tirado en el piso durante dos minutos obligando al VAR a revisar lo obvio. Es que Rey Hilfer sancionó con amarilla una plancha brutal a la tibia, pero si el español no demoraba su reincorporación probablemente se hubiera pasado de largo.

Tras la roja Úbeda sorprendió con otro cambio, porque sacó a Zeballos y puso a Zenón, en una variante que pareció poco valiente por el contexto y el tener superioridad numérica. Pero, afortunadamente, una vez más Herrera terminó siendo determinante al recibir una falta dentro del área que culminó en penal para Boca. Ahí Merentiel, quizás el peor de campo del equipo, se hizo cargo, pateó al medio y puso el 2-1. Insólitamente, pese al tiempo cumplido, el árbitro dio un par de minutos más y el Xeneize pudo haber marcado otro, en una jugada donde hubo otra infracción clara que debió ser remate desde los doce pasos para el azul y oro, pero que la terna perdonó.

Boca ganó por carácter, por Zeballos, por la inteligencia de Herrera y por merecimiento. El equipo sumó tres puntos decisivos que lo posicionan como líder de la zona y le da un colchón de puntos clave de cara a la clasificación a la Libertadores. Hoy el Xeneize le saca cinco puntos sobre seis en juego a los que pueden arrebatarle el repacheje a la Copa. Además, sin contar lo que hagan hoy ante Gimnasia, supera por un punto a un River que queda casi obligado a ganar el Superclásico.