Cuando el arribo del exIndependiente parecía cerrado y estaba dado como jugador de Boca Juniors, surgieron trabas y no se sabe que va a pasar aún.
Tras la desvinculación y rescisión de su contrato con el Getafe, el arquero de 26 años, hace 72 hs nomas, era confirmado como el primer refuerzo del plantel de Primera División del Xeneize pero debido a diferencias económicas, se complicó su llegada.
Con el pase en su poder, tenía los números claros de lo que iba a firmar, de acuerdo a lo dialogado con la dirigencia de La Ribera. Pero al llegar a Argentina vio en los papeles que el contrato tenía otra cantidad de dinero que a Osky no le cerraron.
Por lo tanto está en stand by la firma de su contrato, con lo cual su representante Claudio Curti seguirá en negociaciones con el club, en el que admitieron que el futbolista no había viajado hacia Buenos Aires para hacerlo.
Con esta complicación siguen pasando los días y Boca no tiene un arquero de experiencia aún, a 2 semanas de comenzar el Torneo Inicial. Más allá que según un periódico peruano, el guardameta de su selección, Raúl Fernández, tendría una posibilidad de ocupar la valla auriazul.