La vuelta de Carlos Tevez no modificó el andar de un equipo que sigue sacando diferencias y que sueña con revalidar su título.
Boca Juniors venció a Colón de Santa Fe en La Bombonera por 2-0 y estiró la ventaja por sobre el resto en la Superliga, demostrando que nada cambió en este 2018. El Xeneize dejó todas las dudas de la pretemporada en el verano, exhibiendo su verdadero nivel en los partidos que realmente lo valen.
Arrasador. Boca tuvo 30 minutos de un nivel altísimo en el que todas las piezas funcionaron a la perfección. Se ganó en las divididas, se tapó los huecos defensivos y en ataque había una diferencia de técnica y velocidad muy notoria. El gol llegó por merecimiento e incluyó trece pases y un precioso taco de Walter Bou para habilitar a Cristian Pavón, que luego el cordobés concretó con un derechazo que vulneró al ecuatoriano Domínguez. Carlos Tevez, en su vuelta, fue importante en el andamiaje del equipo durante este gran lapso.
Dudas. El cansancio – en especial de los extremos – hizo que Boca sufriera en los últimos minutos de la primera parte. Colón se aprovechó que Cardona y Pavón no estuvieran tan veloces para ayudar a los laterales, algo que descompensó el doble cinco y generó que Agustín Rossi tuviera un par de tapadas clave. La falta de partidos de pretemporada por parte de los colombianos, más el cambio de esquema y la poca práctica de este once, también influyó.
Reinvención. Guillermo decidió sacar a Walter Bou cuando promediaba el complemento y varió el 4231 al clásico 4312 de Boca. Tevez quedó de 9, Cardona de enganche y Nández de volante por izquierda. Fue justamente el uruguayo, la gran figura del partido, quien cerró la victoria tras un pase del Apache que él definió – con belleza – por sobre encima del altísimo arquero de Colón.
Cierre. Ya en ventaja, Federico Beligoy expulsó a Toledo por un patadón sobre Carlos Tevez, en su único acierto. El árbitro no quiso expulsar a Pablo Ledesma pese a sus constantes faltas estando amonestado, tampoco a Fritzler tras sus agresiones sin pelota a Cardona y Barrios. Pero, su principial error, fue el grosero penal por mano de Conti que no sancionó cuando el encuentro iba 1-0. Más allá de los horrores del juez, los últimos minutos del juego le sirvieron al Mellizo para hacer debutar a Julio Buffarini y darle continuidad a Gonzalo Maroni y Cristian Espinoza.
La próxima fecha Boca visitará el Nuevo Gasómetro con la misión de sacarle nueve puntos a San Lorenzo y así empezar a darle – desde temprano – forma al campeonato. Nivel y jugadores hay, ahora solo resta seguir confirmándolo en la cancha.