El Xeneize sacó una ventaja importantísima para soñar con meterse de nuevo en la última instancia del torneo más importante.
Boca Juniors derrotó al Palmeiras por 2-0 gracias a la brillante actuación de Darío Benedetto. Pipa entró en el segundo tiempo y fue determinante al marcar los dos tantos del Xeneize con los que el equipo de los Mellizos se va a Brasil de cara a la vuelta de la semifinal de la Copa Libertadores.
Guillermo sorprendió en el inicio planteando un 433 con Mauro Zárate como extremo, posición en la que nunca lo utilizó desde que llegó a Boca. Quizás esa estrategia fue vital para esos primeros 20 minutos en los que el equipo, sin mucha profundidad, incomodó al Palmeiras mostrando una cara agresiva y de comprensión sobre lo que se ponía en juego. Lamentablemente tras ese lapso el partido se partió, se acabaron las ideas y el verdao empezó a tener la pelota, aunque tampoco sin nunca inquietar seriamente a Agustín Rossi.
En el complemento el Mellizo adelantó al equipo y se la jugó con Sebastián Villa por Mauro Zárate, logrando otra breve reacción que ilusionó a los hinchas. Aún así, de nuevo el partido se convirtió en un tedio en el que la pelota volaba por el aire y en el que ninguno de los dos tenía la claridad para hacerse cargo del juego. Lo mejor para Boca en ese momento era el no sufrir y que, pese a no estar en ganador, el cero en el arco seguía siendo una ventaja pensando en la vuelta.
Todo cambió con Benedetto. La gran figura del ciclo de los Mellizos encontró en esta noche, la más importante en muchos años, el nivel que tenía previo a esa lesión ligamentaria. Aprovechando a dos centrales que quedaron cansados por el esfuerzo de Wanchope, y un córner que llegó tras una enorme tapada del arquero Weverton a Olaza en un tiro libre, Pipa conectó un de Villa y abrió el juego con un cabezazo cruzado imparable. Inmediatamente el goleador estalló en llanto, recordando todo el duro proceso para recuperarse y volver a ser.
Si ya el 1-0 parecía un notición por lo parejo que fue el desarrollo del partido, Darío Benedetto tenía una carta guardada como para terminar de desatar la euforia del templo. Tras un pase de Pablo Pérez, Pipa en un movimiento pisó la pelota, dejó pagando a Luan y se acomodó la pelota para romperle el arco a Weverton con un derechazo cruzado.
Boca está a 90 minutos de volver a jugar una final de Libertadores, teniendo la ventaja del cero en el arco, del resultado y de tener la mística de Benedetto a su favor.
FORMACIONES Y DATOS:
Boca Juniors: Agustín Rossi; Leonardo Jara, Carlos Izquierdoz, Lisandro Magallán, Lucas Olaza; Wilmar Barrios, Pablo Pérez; Nahitan Nández, Mauro Zárate, Cristian Pavón; Ramón Ábila.
Suplentes: Carlos Lampe; Julio Buffarini, Paolo Goltz; Fernando Gago; Carlos Tevez, Sebastián Villa, Darío Benedetto. DT: Guillermo Barros Schelotto.
Palmeiras: Weverton; Mayke, Luan, Gustavo Gómez, Diogo Barbosa; Felipe Melo, Bruno Henrique; Willian, Moises, Dudu; Borja.
Suplentes: Jailson; Edu Dracena, Victor Luis; Thiago Santos, Hyoran, Lucas Lima, Deyverson. DT: Felipe Scolari.
Árbitro: Roberto Tobar (Chile)
Estadio: La Bombonera.
Televisa: Fox Sports.
Hora: 21.45.
Nicolas
25 octubre, 2018 at 00:15
Zárate tiene que jugar suelto detrás del nueve con Villa y wanchope.