Dos juveniles regresaron de diferentes préstamos en el fútbol internacional. Pero Boca Juniors les busca nuevo destino para que tengan continuidad.
Nicolás Maná y Gabriel Ferreyra volvieron al Xeneize luego de sumar un año de experiencia en diferentes ligas del exterior. Aún así, al no tener chances dentro del plantel de primera ni el de reserva, se irán cedidos para intentar demostrar su capacidad. Mirá cómo viene el caso de cada uno:
Gabriel Ferreyra: es un volante central de mucha técnica que acaba de cumplir – el 3 de febrero – 22 años de edad. Él regresó a Boca Juniors luego de jugar en el AIK Footboll de Suecia, club en el que quizás no encontró todas las oportunidades que esperaba. Aún no hay un destino posible para cederlo.
Nicolás Maná: delantero por afuera nacido en Rosario allá por 1994. Con – todavía – 21 años, volvió a Boca Juniors luego de un buen paso por San Martín de Porres. Club peruano en el que tuvo bastante actividad y con el que empezó a jugar de volante por ambas bandas. Hay una chance de que se vaya a préstamo por seis meses a Gimnasia de La Plata.
