¿Quién se destacó, quién tuvo un partido irregular y quién fue el punto más bajo de los protagonistas de este encuentro del único grande?
Luca Langoni: cuando el delantero estuvo en cancha se vio lo mejor de Boca. Explosivo en el uno contra uno, imparable atacando el espacio, desequilibrante a la hora de generar situaciones, de sus pies llegó el pase a Ezequiel Bullaude para el único gol del encuentro. Si está bien en lo físico, es indispensable.
Ezequiel Bullaude: anotó el gol del triunfo y tuvo otra clarísima en la que no logró definir bien ante Federico Abadía. Se valora mucho su hambre por marcar y cómo llega sin pelota, pero sigue estando en deuda cuando la tiene en sus pies. Tiene la calidad y las características para destacarse aún más en el juego, en especial ahora que se para detrás de los delanteros como él se siente cómodo.
Juan Ramírez: su primer tiempo fue el mejor que tuvo en muchísimo tiempo. El volante se mostró con otra actitud, pareciéndose a aquel que era cuando llegó, recuperando, haciendo toda la banda, generando faltas y generando desde su arranque. En el complemento, como todo el equipo, bajó el nivel.
Vacante: no fue un partido en el que un jugador de Boca mereciera este lugar. Saracchi estuvo impreciso, pero metió un pase brillante para el 1-0. Merentiel falló dos claras, pero obliga mucho. Los centrales respondieron, Advincula y Pol en su tono. Campuzano estuvo bien y Romero siempre prolijo. Se podría poner alguno de los que ingresaron, pero el contexto no amerita calificarlos negativamente.
