En una extensa nota con el diario Olé, el presidente de Boca, habló de todo. Sus propuestas, la situación económica, Falcioni, Román, Silva. Enterate acá
-¿Sos el mismo? -Sí.
-¿Boca no te cambió? -Soy el mismo con más reponsabilidad.
-¿Estás más tranquilo que al principio o al revés? -Estoy más tranquilo.
-¿Por qué? -Porque veo que pudimos empezar a hacer los cambios, gran parte de la plataforma.
-¿Qué fue lo más difícil? -El traspaso de los juveniles a La Candela.
-¿Se oponían? -Todo cambio genera al principio rechazos, resistencia de algunos…
-¿Qué rechazaban? -Irse de acá.
-¿Cómo los convenciste? -Diciéndoles que yo no les estaba preguntando si querían, sino que se trataba de un tema de campaña que yo había prometido.
-¿Se enojaron muchos? -No renunció nadie.
-¿Qué se hace en el espacio que ocupaban los juveniles en Casa Amarilla? -Los juveniles sólo ocupaban los dormis, donde había 110 chicos. Después, se entrenaban en Ciudad Evita y cancelamos ese contrato.
-¿Ese espacio lo va a aprovechar la Primera? -Vamos a negociar el 50% con una empresa que va a traer turismo y el resto lo va a explotar directamente Boca.
-¿Qué van a hacer? -Los campus que se hacen con turistas en otros lugares: vienen, duermen, practican…
-Como un reality.
-Claro, se vende por semanas.
-¿Dónde lo captaste? -Lo vi cuando estuve en el Real Madrid, ellos tienen toda una parte de hotelería donde se entrena la Primera, lo alquilan y con ese dinero pagan gran parte de los gastos operativos de la ciudad deportiva.
-¿Y esos turistas tienen contacto con el plantel? -No está previsto, vamos a ver. Sí hay mucho interés y hay una empresa que nos hizo una oferta por el 50% de las camas que tenemos acá.
-¿Para cuándo sería? -El mes próximo firmaríamos y en el segundo semestre empezaría a funcionar.
-¿Qué te sorprendió de Boca? -Cómo amplifica.
-¿En qué lo notaste? -Desde el momento en que salgo a la calle o a pasear por Palermo hasta la vuelta del avión de Venezuela, cuando llegué a Ezeiza y no podía caminar.
-¿Te pasaba antes? -No me conocía nadie.
-¿Ese, el de Venezuela, fue el peor momento? -No sé, soy un tipo que no se asusta. Sabía que había un conflicto importante porque estuve allá, pero no era para hablar en el avión. Siempre tuve claro cuál era el procedimiento.
-¿Era un conflicto de poder? -No, era una desinteligencia o un malentendido en el vestuario que no lo resolvieron como debe resolverse: dentro del vestuario y claramente.
-¿No tendrías que haber hablado en Ezeiza? -¿Y qué iba a decir? -Si querías que no se supiera nada, eso mismo, que no pasaba nada.
-Pero pasar, pasó. Yo dije en Ezeiza que Falcioni iba a seguir, que iba a haber una reunión a la noche, que me iba a ocupar del tema. En el avión les pedí a los cinco jugadores que fueran para el hotel. A la noche me junté con el técnico y vi que se podía continuar. Y a todos les dije: “Muchachos, lo más importante es el club. Yo me metí porque eso trascendió. Yo no voy al vestuario, pero si no tienen la capacidad para que no se filtre…
-¿Tuviste miedo de no poder manejarlo? -No, no sabía cuál era la posición final de las partes. Quería escucharlas. Y al final no era tan definida.
-¿Cómo? -No es que los jugadores decían que no querían al técnico ni que el técnico decía “yo me voy…” -¿No decía “si sigue Riquelme yo me voy”? -No, nunca me planteó eso.
-¿Hoy cómo los ves? -Hay jugadores grandes, con experiencia, maduros, que vienen a ganar. Y mientras el equipo va ganando, el club está tranquilo en la semana.
-¿Al DT como lo ves? -Trabajando. El cuerpo técnico trabaja mucho. Después te gusta cómo juega o no, pero yo les dije que lo importante es ganar. Podés jugar como el Barcelona, pero si no entra la pelota… El mejor partido, desde que estoy, fue con el Fluminense, y perdimos. Y con Independiente se tendría que haber planteado de otra manera.
-¿Cómo? -Cuando nos pusimos 4-3, hubiera puesto dos líneas de cuatro.
-¿Te gusta cómo juega Boca? -Me gusta cuando gana.
-Boca para ser campeón jugó bien. ¿Jugó lindo? -A Boca el torneo pasado era muy difícil llegarle. Y por eso sólo le hicieron seis goles.
-¿Te gusta eso? -Los equipos se arman de atrás para adelante. Si mantenés el cero, en algún momento vas a hacer un gol. Contra Independiente yo hubiera tratado de cerrar el partido.
-Vos dijiste que no lo hubieras ido a buscar a Falcioni.
-Así es. Y se lo dije a él.
-¿Cuándo? -La primera vez que hablamos, antes de asumir la presidencia.
-¿Y qué te dijo? -Se rió por mi sinceridad. Y después nos pusimos de acuerdo en la renovación del contrato.
-¿Cambiaste de opinión? ¿Hoy lo irías a buscar a Falcioni? -Sí.
-¿Por qué? -Porque lo vi trabajar, salió campeón, entendió lo que es Boca. Y no hay muchos técnicos para traer a Boca, con el plantel que hay, con lo que es el club. Borghi decía que era como hacer el amor con la ventana abierta. Y no muchos aguantan la presión de hacer un campeonato de mierda y al otro semestre salir campeón.
-¿Este concepto sobre Falcioni no va a cambiar aun si Boca queda afuera de la Copa? -No, mi intención es que cumpla su contrato. Eso no cambia.
-¿Qué es lo que pedís? -Que Boca sea protagonista. Debe estar siempre entre los cinco primeros. Pero para la triple no hay plantel suficiente.
-¿En cantidad o en calidad de jugadores? -No en cuanto a la cantidad: por las lesiones, se sienten los partidos, tenés un plantel de edad promedio de 30 años…
-¿Eso mañana puede ser un problema? -No, por un lado hoy te da la experiencia. Con Arsenal, por ejemplo, yo fui muy tranquilo, sabía que no íbamos a perder por los jugadores de jerarquía. Igual, si vienen ofertas, vamos a vender para que empiecen a jugar los chicos de las Inferiores…
-¿Cuál sería el ideal? -Un mix con cuatro o cinco referentes y el resto con chicos del club.
-¿Cómo es hoy tu relación con Riquelme? -Buena. Mejor de lo que esperábamos los dos. En la primera charla que tuvimos, en Tandil, le dije que lo más importante es el club.
-¿Y qué te dijo? -Que es hincha de Boca y que cuando él vea que no está para jugar va a ser el primero en decirlo. Cree que está para aportar. Yo le dije: “Boca te necesita de la mejor manera para ganar la Copa”.
-¿Lo ves bien? -Lo veo enchufado. Como él pide jugar domingo y miércoles, me parece que lo siente, pero no sólo él: varios lo sienten. Pero está bien, al menos no acusó más dolores de la lesión. Está bien, entrena…
-¿Y el plantel? -También lo veo bien. Obvio que hay simpatías, como en cualquier grupo.
-¿Con qué jugador tenés mejor relación? -Con Mouche.
-¿Por qué? -Un día, cuando yo era tesorero, vino a hablarme, y hablamos siempre. Sacaba a mis hijos a la cancha, es simpático, me cae bien.
-¿Te gusta cómo juega? -Es un buen delantero y tiene que hacer goles. El se quiere ir afuera y yo le digo: nadie compra un delantero que no hace goles. Y él lo sabe, y por eso se queda entrenándose.
-¿Con quién otro? -No, con nadie más.
-¿Te pone ansioso que Silva no haga goles? -No.
-¿Los va a hacer? -Sí, si no, no lo hubiera traído.
-Obolo lleva cuatro…
-(se ríe) Me gustaba Suazo, pero no tengo dudas de que el uruguayo va a triunfar en Boca. Así son los goleadores, se les abre el arco y ya está. A Roncaglia le dije: una vez que Silva iba a hacer un gol, se lo sacaste.
-¿Roncaglia se queda? -Creo que sí.
-¿Por qué tanto optimismo? -Porque es Boca.
-¿El quiere quedarse? -Me dijo que sí. Y el club quiere que se quede. Hay que ceder para llegar a un punto de encuentro.
-¿Hay mucha diferencia hoy por hoy? -No sé, hay distintas maneras de llegar a un acuerdo. Lo que no puedo es hacerme cargo de todo lo que no se hizo de diciembre para atrás.
-¿Qué no se hizo? -Ajustarle el contrato cuando volvió del Espanyol, le tendrían que haber hecho un contrato profesional. Cuando pedí el contrato y vi que ganaba 200.000 pesos por año me pareció insostenible. Un titular no puede ganar eso.
-¿Y qué va a pasar con Cvitanich? -Le pedí al Ajax 90 días hasta que se abra el libro de pases. Si era hoy, no podía tomar la opción. Si a mitad de año vendemos bien a algún o algunos delanteros, tomamos la opción por Cvitanich.
-¿Y si no venden? -Jugarán los que están en el club.
-¿Cuánto dinero tiene que entrar por ventas? -10.000.000 de dólares.
-¿Tenés la esperanza de vender a un solo jugador en esa cifra? -No creo, hoy la crisis llegó a Europa. Hay buenos mercados: Brasil o México.
-¿Cuántos calculás que van a tener que vender? -Dos o tres jugadores.
-¿Por qué no se vendió a ningún jugador del equipo campeón? -Hubo ofertas antes de que yo llegara, pero las desecharon por un tema electoral.
-¿Eran buenas? -Hubo una por un jugador al que yo hubiera vendido.
-¿Por quién? -Por Chávez, una oferta importante de Brasil. Sobre todo para un jugador suplente, porque el titular es Riquelme. Encima le prometieron un ajuste del contrato por no venderlo. Todas herencias que hay que resolver.
-¿El superavit era una ficción? -Siempre dije que el balance era muy técnico.
-¿Por qué?
-Depende de cómo amortices juveniles y también de las ventas. El balance tenía un déficit operativo de 44 millones y las ventas lo llevaron a 50 millones de superávit.
-Las ventas cuentan.
-Pero eso no quiere decir que estuviera la plata. Cuando asumí, en caja había 5.100.000. Y el balance de corte, que se hizo de julio a diciembre, ya da 25 millones de pérdida.
-¿Y cómo creés que vas a cerrar? -Bien porque conseguimos recursos extra y firmamos buenos contratos. Pero tenemos que vender.
-¿Qué nuevos ingresos tenés? -Los partidos de verano y amistosos a mitad de año: dos en Colombia y uno en Costa Rica.
-¿Nada en Europa? -No, las propuestas de Colombia y Costa Rica son mejores que las de Europa y queda más cerca.
-¿Y la pretemporada? -En Brasil, en el mismo lugar.
-¿Con Falcioni? -Sí.
-¿Por qué Barcelona? -Nos da prestigio que nos haya elegido…
-¿Boca eligió a Barcelona o Barcelona a Boca? -Surgió la posibilidad para firmar un convenio. Yo sabía que Barcelona iba a desarmar su proyecto acá y Boca tuvo la prioridad para elegir entre los 300 chicos que había. Y 39 pasaron a ser 100% del club. Le reconocemos al Barcelona, como a todos los que traen a algún chico, el 20% de una futura venta.
-¿Qué te encontraste en las Inferiores? -Las Inferiores de Boca funcionaban bien. El año pasado, de las seis categorías, tres salieron campeonas. Sin embargo, cada categoría jugaba de distinta manera. Y ahora todas deben jugar igual.
-¿Y cuál es esa manera? Porque Falcioni no juega como en el Barcelona…
-Pero no vamos a jugar como el Barcelona, porque no tenemos los jugadores que tiene el Barcelona. De ahora en más vamos a tener nuestro propio estilo.
-¿Cuál será ese estilo? -Un estilo que nos guste, con el que se tratará de llegar a lo más parecido de jugar bien y ganar.
-¿Eso no se va a modificar con la llegada de ningún técnico, como pasó con Borghi, que jugaba con línea de tres? -Nunca más va a pasar eso. Ojalá Falcioni se quede los cuatro años de mi gestión, porque eso querrá decir que a Boca le va bien. Pero el próximo técnico tendrá que adaptarse a nuestro proyecto.
-¿No van a ir a buscar un DT con otra filosofía? -No.
-Macri quería el 9 de 11.
-Con que en cancha tengamos a seis chicos del club estaremos contentos.
-¿Cuál es la nueva joyita de las Inferiores? -Hay varios, pero me parece que Leandro Paredes es el que más se destaca. Hay muchos pibes que pintan, después hay que ver cómo rinden. Lo que sí, no puede haber 110 pibes en la pensión como antes.
-¿Por qué? -Tiene que estar en la pensión sólo aquel jugador que sea diferente en su puesto. Por ejemplo, el 90% de los chicos del Real Madrid son de Madrid y el 90% del Barcelona son catalanes. No van a buscar por toda España a los jugadores.
-La captación es local…
-Claro, y acá Capital y Gran Buenos Aires tienen que ser la primera captación de Boca. Para traer a un chico de Formosa, tiene que ser diferente de verdad. Acá había 14 chicos por categoría en la pensión…
-¿Cuántos hay hoy? -Sesenta y pico. Hemos dejado libres a muchos chicos. Nos podemos equivocar, obvio, como pasó con el hijo del Mono Perotti, que acá lo dejaron libre y hoy la rompe en España, pero no por eso vas a tener 60 chicos de más.
-¿Boca puede ganar la Copa Libertadores? -Tiene posibilidades. Pero tiene muchas más chances de ganar el torneo local.
-¿Vos le darías prioridad al torneo local? -No, porque estamos obligados a pelear la Copa.
-¿Qué quiere la gente? -Para los hinchas la Copa es la prioridad y está bien.
-¿A quién viste de cuco en la Copa? -Los brasileños juegan bien… Hay mayor competencia en la Copa que en el torneo local. Si Boca tuviera una sola competencia, no tengo dudas de que volvería a ganar el título.
-¿Por 12 puntos? -Por uno, pero lo gana.
-El Flu es duro…
-Seguro. Igual, así como estaba convencido de que ganábamos en Sarandí, estoy convencido de que en Río no vamos a perder.
-¿Qué promesa de campaña ya cumpliste? -Padre e hijo socios; socio adherente; sectores para vitalicios y discapacitados; pasillos libres; no más colados; 300 butacas más; palcos nuevos; ir a La Candela; Raffo y Hugo Ibarra en las Inferiores…
-¿Cuál te falta cumplir? -La del estadio. Si podemos reformar la Bombonera o hacer un nuevo estadio. Y la ciudad deportiva en los predios de Ezeiza.
-¿Boca puede volver a estar entre los cinco clubes del mundo? -Si no, no estaría acá.
-¿Extrañás a River? -No. Para nada.
-¿Le va a hacer bien a Boca que vuelva? -Le hará bien al fútbol. Los clásicos son únicos.
-¿Ves a River? -Poco.
-¿Te gusta cómo juega? -Tiene tres jugadores interesantes. Debe ser difícil jugar en la B, pero tiene un equipo de Primera. Tendría que ascender cómodo.
-¿Qué otros entrenadores te gustan? -Me gusta Falcioni.
