Más allá del resultado, el amistoso dejó jugadores tocados que podrían perderse partidos oficiales.
Si bien el choque ante River ayudaba a no perder ritmo futbolístico durante el parate por la doble fecha de Eliminatorias, el miedo de que algún jugador sufriera una lesión era un fantasma que rondaba en el Mundo Boca. Y, lamentablemente, sucedió. Guillermo Barros Schelotto podría perder a dos futbolistas de cara al partido ante Lanús por la segunda fecha de la Superliga argentina.
Uno de ellos es Cristian Espinoza, quien a los 41′ del primer tiempo picó al vacío tras un pase largo de Fernando Gago y aminoró la carrera ante la posibilidad de jugarle un mano a mano a Jonathan Maidana, último hombre de la defensa rival. Lo que prometía ser una de las chances más claras para el Xeneize terminó siendo una situación desafortunada, ya que el extremo sintió un pinchazo en el abductor izquierdo y debió ser reemplazado inmediatamente. El ex Huracán se hará estudios para constatar el grado de la lesión, pero todo indica que sería un desgarro.
Otro que padeció molestias durante la primera parte del juego fue Paolo Goltz. El zaguero central respondió de manera segura ante cada llegada del Millonario, pero resultó herido en dos oportunidades debido a su tenacidad en la marca. A los 26′ tuvo un corte en la cabeza tras un tiro libre en contra, que lo obligó a usar un gorro de natación durante los minutos siguientes. Sin embargo, en la última jugada chocó con De La Cruz y se cortó el pómulo derecho. En el vestuario fue cocido pero no pudo seguir en cancha.
En lugar de ambos jugadores, Pablo Pérez y Santiago Vergini saltaron al verde césped de entrada en el segundo tiempo. Boca visitará a Lanús el próximo domingo 10 de septiembre y el miércoles siguiente jugará frente a Guillermo Brown de Puerto Madryn por los dieciseisavos de final de la Copa Argentina. ¿Estarán disponibles Espinoza y Goltz?
Además, Fernando Gago sufrió un duro golpe contra el piso en una de sus orejas, lo que le provocó un fuerte mareo que le hizo perder el equilibrio y la orientación. También fue reemplazado y directamente se marchó al vestuario. Por precaución, el volante será evaluado en un hospital para descartarse cualquier inconveniente mayor.
