El complejo de Casa Amarilla ubicado en La Boca, uno de los barrios más afectados por el temporal de ayer, sufrió las consecuencias de los intensos vientos que acompañaron a la tormenta.
Cuando empezaba a transcurrir la noche del miércoles, nadie suponía que la tormenta anunciada por el Servicio Meteorológico Nacional iba a arrasar con todo lo que encontrara a su paso.
El alambrado perimetral del predio donde entrena el conjunto de Julio Falcioni también sufrió las ráfagas de viento de alrededor de 100 km/h. Afortunadamente no llegaron a caerse en su totalidad pero quedaron en una posición un tanto peligrosa sabiendo que ahí entrenan los jugadores.
Boca no fue el único equipo afectado por este fenómeno climático: Barracas Central, San Lorenzo, Deportivo Morón y Nueva Chicago padecieron las consecuencias en sus estadios.
Foto: Olé