Un repaso por el legado que dejaron aquellos futbolistas que vinieron desde el extranjero y con la ilusión de representar a su país en el azul y oro.
A lo largo de la historia Boca tuvo la suerte de contar con al menos un jugador de cada uno de los países que disputan torneos de CONMEBOL. Con el regreso confirmado de Gary Medel, es una buena ocasión para recordar cuál ha sido el nexo de la institución con aquellos futbolistas nacidos en Chile.
En total son siete los jugadores trasandinos que se vistieron con la azul y oro. Gary Medel es el dueño de varios récords entre sus compatriotas: será el primero en tener más de un ciclo en Boca, es el que más partidos disputó (48), el que más goles convirtió (7) y el único que marcó en Superclásicos (2 tantos).
El primer chileno en jugar en Boca fue Roberto Santiago Luco Belmar, delantero que llegó al club desde el Colo Colo y que fue parte del plantel que se consagró bicampeón del fútbol argentino en los años 1934/35. En total disputó sólo nueve partidos y sin marcar goles en las temporadas que jugó en el Xeneize. Luego su carrera continuó y terminó en el Cacique de su país.
Tuvieron que pasar seis décadas para que otro jugador nacido en Chile llegue a Boca de manera oficial. El elegido fue Ivo Basay, delantero que venía de ser figura en su Selección y de tener un gran nivel en la liga de México. Lamentablemente su paso fue muy breve, jugando unos pocos meses en Argentina, con sólo nueve partidos y cuatro goles. Su falta de conexión con el cuerpo técnico de César Luis Menotti fue el causal de que ambas partes decidieran que el pase se cierre antes de tiempo.
En las inferiores de Boca hubo tres jugadores chilenos que llegaron a rozar el profesionalismo con el club. El primero de ellos fue Iván Alejandro Sepúlveda, mediapunta que disputó un amistoso contra un combinado de General Sarmiento en 1989 y que luego continuó su carrera en el ascenso de Argentina. El segundo caso es el de Luis Antonio Liendo, mediocampista que apenas jugó medio tiempo en el encuentro de preparación contra Huracán Corrientes en 1998. Posteriormente se fue al exterior, jugando en el Real Madrid Castilla, en Italia y en Bolivia, país con el que llegó a jugar en la Selección gracias a la nacionalidad de su madre. El último es Marco Antonio Bahamonde, un enganche al que Carlos Bianchi le dio la oportunidad de jugar tres partidos durante el verano del 2000. El Virrey además le dio el privilegio usar la camiseta número 10 durante el recordado Superclásico en el que los pibes del Xeneize le ganaron al River de Ramón Díaz por 2-1 con goles de Alfredo Moreno y Sebastián Battaglia. Al dejar la institución se fue al Porvenir y de ahí regresó a su país para jugar en el Osorno. Por culpa de una lesión, conflicto con su representante y desamor con el fútbol, se retiró joven a los 23 años.
Cronológicamente tras Ivo Basay apareció Gary Medel, que con su regreso podrá seguir mejorando lo que fue un gran primer paso. Tras él, y siendo el último chileno en jugar en Boca hasta el momento, apareció José Pedro Fuenzalida. El chileno arribó desde Universidad Católica y venía con experiencia de se parte del plantel de su país que disputó el Mundial 2014.Con Rodolfo Arruabarrena se desempeñó en muchas posiciones durante en su etapa en la institución. En total jugó 36 partidos, marcó un gol y ganó dos títulos: campeonato y Copa Argentina 2015. Además, representando al Xeneize se consagró campeón de la Copa América con La Roja. Al irse cerró su carrera en su club de origen.
Los chilenos que jugaron en Boca:
1- Roberto Santiago Luco Belmar (9 partidos, 0 goles y 2 títulos entre 1934/36)
2- Iván Alejandro Sepúlveda (1 partido, sin goles ni títulos en 1989)
3- Ivo Basay (9 partidos, 4 goles y sin títulos en 1994)
4- Luis Antonio Liendo (1 partido, sin goles ni títulos en 1998)
5- Marco Antonio Bahamonde (3 partidos, sin goles ni títulos en el 2000)
6- Gary Medel (48 partidos, 7 goles y sin títulos en 2009/10)
7- José Pedro Fuenzalida (36 partidos, 1 gol y 2 títulos en 2015).
TEXTO: Boca Juniors oficial.
