¿Regreso inesperado?

Te contamos todos los detalles sobre una posibilidad que generó revuelo entre los hinchas.

Marcos Díaz es uno de los jugadores cuya continuidad para lo que viene está en duda. El arquero está a préstamo, su vínculo vence en junio y se rumorea que tiene una oferta concreta para irse a jugar al Leganés de España. La comisión de Fútbol no descarta proponerle extender su estadía, pero siempre y cuando él baje sus pretensiones salariales, ya que su alto contrato es otro de los inconvenientes que podrían alejarlo. En caso que esto no ocurra, y ante la necesidad de una incorporación, en las últimas horas surgió un posible reemplazo que generó sorpresa, ya que se trata de un conocido de la casa como Javier García.

El propio Jorge Amor Ameal, en diálogo con La Red, no descartó la posibilidad de este regreso en caso de ser necesario: «Tenemos al Consejo de Fútbol para decidir. Yo tengo una excelente relación con Javi (García). Tengo un cariño particular hacia él y es un excelente arquero», contó el Presidente.

Javier García está en una situación parecida a la de Marcos Díaz, ya que todo indica que él no quiere continuar en Racing y eso haría que su llegada a Boca sea económica. Él es el último arquero formado en las inferiores que logró sostenerse en el tiempo como titular del club, teniendo el plus de la identidad y del conocer a la perfección lo que significa defender ese arco. En su etapa disputó 53 partidos, tuvo 17 vallas invictas, grandes rendimientos ante River  y ganó el Apertura 2008.

Dentro del análisis podría entrar el hecho que Javierg García llegaría con 33 años y con la experiencia de poder adaptarse sin problemas al rol de ser el segundo o tercer arquero, como le ha tocado en Racing, club que quiere retenerlo por sus buenas actuaciones. Por su parte, Marcos Díaz es un año mayor y también ha dejado en claro en varias entrevistas su deseo de sumar más minutos en la rotación, algo que con Esteban Andrada parece poco probable, y que lo podría empujarse a irse a probar suerte al Leganés.

Los puntos que pueden generar polémica sobre García es su relación con Riquelme, generando esa idea de «club de amigos» que ya ha circulado en las redes sociales. También está la imagen que muchos hinchas tienen de él como arquero, quedándose con los errores que tuvo en su paso por el club cuando era un juvenil, y sin repasar su excelente estadía en Tigre y lo mucho que le ha rendido a Racing en ese rol de suplente, teniendo incluso grandes actuaciones como en el último clásico de Avellaneda donde fue la figura excluyente.

Más allá de lo bueno o lo malo que se pueda decir sobre García, esto por ahora es una posibilidad que aparece en la órbita frente a la chance que Marcos Díaz no continúe. También habrá que analizar qué sucederá con Agustín Rossi, quien debe volver en junio y que se habla de una posible venta al Udinese; en su caso, se sabe que él sí reclamara muchos minutos en caso de quedarse. Por otro lado, en Boca tienen a Manuel Roffo como la promesa del puesto; saben que el juvenil tiene que empezar a tener rodaje en primera, por lo que la llegada de un arquero de experiencia y sin pretensiones de titularidad, pueden ayudarlo a que él termine siendo el segundo por detrás de Andrada.

Por último, tampoco hay que descartar que aparezca alguna negociación por Esteban Andrada que rompa todo, ya que por nivel y características, tiene las condiciones para irse a Europa. Sabandija ya tiene 30 años y quizás esté ante su última gran oportunidad de ir al Viejo Continente, pero esta pandemia y lo poco que parece que se moverá el mercado puede atentar contra su salida y favorecer a Boca de sostenerlo en el puesto. Está claro que en caso de ser vendido ahí Boca buscaría retener a Rossi o saldría al mercado por un nombre de jerarquía.

El puesto del arco está en duda para el futuro, en especial en el rol del arquero que acompañe al titular y a la promesa. ¿Se quedaría Diaz? ¿Volverá García? El tiempo lo dirá.