¿Se lo roba a River?

Conocé cómo vienen las negociaciones por un futbolista muy interesante que aparece como posible sustituto ante la lesión de un titular.

Boca Juniors sigue en la búsqueda de un jugador idóneo para sustituir a Frank Fabra tras su ruptura de ligamentos. El primer candidato era Jonathan Silva, quien decidió no regresar y es por eso que su futuro estará en el Leganés de España. Es por eso que ahora el nombre que toma fuerza es el de Lucas Olaza, lateral por izquierda de Talleres al que también apunta River Plate.

Lucas Olaza está pronto a cumplir 24 años y viene de tener grandes rendimientos en Talleres. El conjunto Albiazul posee el 70% de su pase, el cual lo tiene tasado en seis millones de dólares. Boca no está dispuesto a pagar semejante cifra, pero sí el volver a dar juveniles como realizó con la llegada de Emanuel Reynoso. El apellido clave en esta operación sería el de Tomás Pochettino, futbolista que interesa en Córdoba y que no tiene lugar en el Xeneize. El gran rendimiento del volante en Defensa y Justicia sería el motivo por el cual se podría producir este trueque.

Uno de los problemas con Lucas Olaza es que es uruguayo y ocuparía cupo. Ahora el Xeneize no tiene lugar, pero Sebastián Pérez será negociado y con él se liberará uno. Además, Boca solicitó a la AFA que Frank Fabra no cuente debido a que la lesión que sufrió lo descartará por los próximos seis/ocho meses y su problema físico ocurrió mientras él fue cedido al Mundial que organiza la FIFA. En ese caso que se den estas dos situaciones, la llegada del lateral de Talleres no sería un problema, permitiéndole al Mellizo el poder insistir por Gustavo Gómez en caso que quiera estirar esa interminable novela.

Más allá de la compra o no de un jugador de mayor experiencia para suplir a Frank Fabra, lo que sorprende es que Guillermo Barros Schelotto no haya ni siquiera intentado subir a un juvenil para llevarlo como sparring a la pretemporada. Peter Grance Martínez, categoría 1999, viene de ser titular y de demostrar un buen nivel en la reserva. Luego se encuentra Gusa Sández, quien brilló en la 2001 campeona en China y que se quedó en la semifinales de la Superliga Juvenil. Tampoco ha sido probado Pedro Silva Torrejón, cordobés de la 1997 que regresó al club tras un correcto paso por Olimpo y que ahora busca nuevo destino. Evidentemente el Mellizo no confía en las inferiores, ni siquiera para solucionar la ausencia de un jugador en un puesto clave durante los entrenamientos y hasta que se concrete el refuerzo que espera.

Lucas Olaza puede ser el nuevo refuerzo de jerarquía de Boca, ¿lo será?