En un partido frente a Unión de Santa Fe se iniciaba el camino de gloria del máximo ídolo de Boca Juniors. Repasá los mejores momentos del 10.
Boca jugaba mal, no peleaba por el título y el público Xeneize le exigía a Carlos Bilardo que pusiese a «los pibes del club.» El técnico campeón del mundo con la Selección Argentina en 1986 los escuchó y se la jugó al poner a un joven de 18 años que la rompía en la Reserva. Con gran personalidad, ese chico flaco, alto, de piernas delgadas, cabello crespo y dueño de un físico aparentemente frágil, apareció como titular ante Unión por la última fecha del Apertura de 1996. Su nombre era Juan Román Riquelme, y esa tarde iniciaba un camino de idolatría que cambiaría para siempre la historia del Xeneize.
Con la 8 en la espalda, el juvenil superó las expectativas y fue la gran figura del partido en su debut. Pisadas, pases imposibles y una asistencia a Fernando Cáceres para el segundo gol del equipo, fueron algunos de los gestos de calidad que exhibió en el triunfo por 2-0 con el que Boca le ganó al Tatengue. La gente que ese día fue a la cancha presenció el nacimiento de una leyenda, de un jugador diferente que parecía hecho para jugar con la azul y oro. Fue por eso que en sus primer encuentro lo premiaron a lo largo, y al final del encuentro, con más de una ovación.
La primera asistencia de Riquelme, en su debut contra Unión:
Hoy se cumplen 21 años del debut del último 10. Desde aquella primera vez contra Unión su carrera comenzaría a tomar un sinfín de éxitos, que terminó de potenciarse con la llegada de Carlos Bianchi en 1998. El entrenador le dio confianza, logrando que haga su transformación de promesa a crack global.
Aparecía en las difíciles, brillaba contra River y generaba esa increíble sensación de que con él en cancha no se podía perder. Román educó con su fútbol a varias generaciones, enseñándole la importancia de la posesión, el control y la inteligencia táctica. También, que la valentía más importante es la de pedirla cuando todos se ocultan.
Riquelme disputó 427 partidos y anotó 99 goles con la camiseta de Boca, siendo el que más veces jugó en La Bombonera en toda la historia del club. Además, obtuvo once títulos (tres Libertadores, una Intercontinental, una Recopa, una Copa Argentina y cinco torneos locales). Fuera de las estadísticas, Román se ganó el mejor premio de todos: el amor incondicional de todos los Xeneizes.
Los 20 mejores momentos de la carrera de Román:
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- Su debut. El 10 de noviembre de 1996 tenía su primer partido oficial en Primera División como titular en la mismísima Bombonera. Carlos Bilardo lo mandó a la cancha de entrada y él no le falló: fue la figura, con asistencia a Cáceres incluida para el 2-0 a Unión. La gente lo ovacionó en más de una oportunidad. Nacía el ídolo.
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- Malasia 97. Riquelme fue la gran figura del campeonato Mundial Sub 20 que ganó la Argentina. Acá levantando la copa con su amigo Diego Markic tras derrotar por 2-1 a Uruguay. En juveniles albicelestes también obtuvo el Sudamericano de ese año y la Copa Sub-21 «Esperanzas de Toulón» disputada en 1998.
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- Riquelme gritando su primer gol en Boca. Su debut en la red con la azul y oro fue con Huracán, en una goleada por 6-1 disputada en La Bombonera. Terminó con 99 tantos oficiales en el Xeneize.
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- El primer título. Boca fue campeón con Bianchi y un equipo de lujo. Román lo celebra a lo grande junto a Martin Palermo tras igualar 0-0 ante Independiente. Ese equipo terminaría siendo bicampeón y logrando un récord de estar 40 partidos sin ser derrotado.
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- Riquelme siempre se ha destacado contra River Plate. En la Libertadores 2000 fue la gran figura de la serie al convertir dos goles, dar una asistencia al Chelo Delgado e inventar un caño contra Yepes. Este cruce fue una muestra del gran nivel que alcanzó Román en esa Copa, la primera de las tres que ganaría con la azul y oro.
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- El día que conquistó al mundo. Riquelme la rompió contra el Real Madrid y se egresó como crack. Boca venció por 2-1 al conjunto español ante 10.000 Xeneizes que acompañaron en Japón. Geremi y Makelelé sufrieron las pisadas de un Román que brilló en la más difícil de todas. El mundo esperaba que Luis Figo la rompiera, pero se terminaron encontrando con el genio de Torcuato.
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- El famoso Topo Gigio. Riquelme fue figura, con gol incluido, en el Superclásico del 2001 en el que Boca goleó a River Plate por 3-0 en La Bombonera. Tras marcar el 10 fue derecho a inmortalizar un festejo que tenía el peso de la protesta por el destrato de la dirigencia hacia él. «¿Fue para Macri? ‘No, para mi hija'», dijo el 10 entre sonrisas.
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- Una foto que dice mucho.Maradona se despidió del fútbol con una camiseta de Boca que tenía la 10 y el nombre de Riquelme. ‘La Bombonera es el templo de Román’, dijo Diego ese día.
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- Su talento lo llevó a Europa. Riquelme llegó al Barcelona en donde sólo jugó un año. Allí conoció a Iniesta, su gran amigo, con el que juntos clasificaron nuevamente al conjunto catalán a la Champions tras un tiempo de ausencia.
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- Del Barcelona pasó al Villarreal. Riquelme llegó al modesto club español y lo catapultó hasta los grandes lugares de Europa. Contra el Inter de Verón y Figo fue figura, logrando la histórica clasificación de ese equipo a la semifinal de la Champions League.
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- El Mundial 2006 fue el único que disputó. Fue elegido el mejor de la cancha por la FIFA en dos partidos (Serbia y Holanda) y se fue invicto sin perder un sólo encuentro, lamentando que Pekerman lo reemplzara cuando Argentina igualaba con Alemania en cuartos de final.
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- Román volvió a Boca en el 2007 y fue la gran figura del equipo en la conquista de una nueva Copa Libertadores. Nunca un futbolista fue tan determinante en la obtención de este máximo título continental. Este fue el primero de los cinco títulos que ganó en su segunda etapa en el Xeneize.
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- Riquelme en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 con la medalla de oro en el cuello. La victoria ante Nigeria por 1-0 fue uno de sus últimos partidos con la Selección Argentina.
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- Riquelme quedó inmortalizado para siempre en una estatua que habita dentro del patio de su casa: La Bombonera. Martín González, fanático de Boca, fue el impulsor de un homenaje a la altura del 10.
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- Gol a Deportivo Merlo para pasar a la final de la Copa Argentina 2012. El Xeneize igualó 1-1 con tanto del 10, llevando la serie a una definición penales en la que él la picó. Boca terminaría ganando este título, siendo el último de Román en el club.
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- Amor eterno. Los hinchas de Boca Juniors hicieron un banderazo masivo en todo el país para pedir el regreso de Juan Román Riquelme. Una demostración más que sirvió de ejemplo de por que el 10 es el máximo ídolo.
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- Vuelvo por papá. Riquelme llamó a Bianchi tras ver una derrota de Boca en un Superclásico de verano para decirle que volvía al club para «sufrir juntos». Los resultados no acompañaron, pero el hincha se dio el gusto de tener a dos de los más queridos otra vez en la institución.
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- Récord. Boca derrotó a Quilmes por 2-0 en La Bombonera, partido que llevó a Riquelme a igualar a Marzolini como el futbolista que más partidos disputó en el templo. Finalmente Román se quedaría con ese mérito en soledad al completar 206 juegos en el «patio de su casa».
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- Riquelme contra Lanús. Boca derrotó por 3-1 al Granate con una sensacional actuación del 10, en el que fue su último partido en el club. La gente, como en su debut, lo ovacionó.
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- Adiós. Daniel Angelici insultó a la historia del club y dejó libre a Riquelme. El 10 decidió no retirarse para irse a jugar seis meses a Argentinos, club que lo formó, consiguiendo el ascenso a primera y culminando su carrera con otro éxito.
