Boca Juniors sigue demostrando su fortaleza como local al derrotar con contundencia a un Rafaela que no logra reaccionar.
Llegó la reacción. El parate de las Eliminatorias le vino justo a los Barros Schelotto, que tuvieron dos semanas para trabajar a fondo y empezar a darle forma al Boca que desean. Al menos ante Rafaela el trabajo se notó: fue una goleada por 3-0 en la se destacó la superioridad entre ambos equipos.
Los primeros minutos no habían sido buenos. PeroTevez, que había errado 9 mano a mano en este 2016, anotó en su décima oportunidad como lo que es, un crack. Pausa y equilibrio para jugar al límite del offside generándole el tiempo necesario a Pérez para asistirlo. Ahí, con la pelota corriendo, definió de primera por encima de Werner para abrir el marcador. El Apache, aún con sus fallos en el área, marcó un tanto importante – el cuarto suyo en el año – que lo convirtió en lo que espera Guillermo de él: ser el goleador del equipo.
Ya con el 1-0 apareció la mejor versión de Boca. El ánimo individual creció y, a partir de ahí, creció el juego colectivo. El segundo tanto llegó de esa manera: pared Tevez-Pavón, pase del 10 para Jara que asistió a Carrizo que, con el arco vacío, puso el segundo. El gol juntó varios conceptos que quiere Guillermo y que ilusionan: la tocaron los 3 de arriba y un lateral terminó siendo decisivo en el ataque.
Otro momento clave fue el penal tapado por Orion. El arquero salió lento ante una pifia de Insaurralde y le cometió falta a Pessoto en el área. Luego, con el apoyo de toda la cancha, le adivinó el remate a Díaz sacándole el disparo al tirarse abajo a su derecha. El 1 cometió 2 errores en el partido, pero a los dos los resolvió con excelencia evitando el 0-1 y el 2-1.
Instantes después del penal tapado se fue expulsado en Rafaela. Ya con 10, Lodeiro, que había ingresado por Pérez, anotó el 3-0 final luego de un gran pase de Carrizo. En los últimos instantes Andrés Chávez, que también ingresó, tuvo dos chances claras para aumentar el marcador, pero una pifia y el palo le ahogaron su gol.
Boca Juniors ganó, se recuperó del traspié con Lanús, y, pese a la fragilidad del rival, empezó a mostrar parte de lo que los Barros Schelotto esperan de su equipo. Pero, lo más importante, fue el enorme apoyo de una Bombonera que latió demostrando que es única e importante.