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Política Boca

Angelici, Gribaudo y el club de los abusivos

Otro hecho bochornoso en el que se vuelve a vulnerar la libertad de los socios de la institución, dejando expuesto el destrato para los ídolos.

La campaña electoral está sacando lo peor del oficialismo de Boca Juniors. Desde que Juan Román Riquelme anunció que jugaría para Jorge Amor Ameal, la actual dirigencia empezó una campaña sucia en la que utilizó medios masivos, candidatos e influencers para intentar poner al ídolo como si fuera un mercenario que se vende al mejor postor.

Las contestaciones de Riquelme fueron golpes duros, en especial porque Román al ir como directivo anuló cualquier especulación económica. A partir de ahí el plan del oficialismo se volvió más desesperado y salvaje, aumentando las operaciones de prensa, sacando un cuadro del 10 que había en el club, tapando su rostro en la foto homenaje a los 19 años del triunfo ante el Real Madrid, y amenazando con anular votos en las elección si el socio se presenta con su camiseta o un tatuaje suyo.

En el medio estuvo el partido con Unión, donde la barra intentó tapar las dos ovaciones para Román. Pero el punto más fuerte ocurrió este sábado, cuando no permitieron que los socios ingresaran a la cancha con caretas de Riquelme que el partido Identidad Xeneize estaba regalando. La excusa de la reglamentación y que, la misma, nació de una directiva policial, quedó expuesta cuando la semana pasada se permitió ingresar con máscaras de Gabigol, delantero que marcó los dos goles ante River en la final de la Libertadores.

 

El miedo genera violencia, y quedó clarísimo que Riquelme los tiene a todos asustados.

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  1. Pingback: Riquelme: «Al final voy a creer que es verdad que Angelici es de Huracán y Gribaudo de Independiente» – Diario Xeneize

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