El equipo de Rodolfo Arruabarrena fue superior al de Guillermo Barros Schelotto y quedó a un partido de lograr el título.
Boca Juniors venció a Lanús por 2-0 y se transformó en el primer finalista de la Copa Argentina 2015. El Xeneize logró superar la semi gracias a los tantos de Nicolás Lodeiro y Carlos Tevez. De esta manera, el equipo de Rodolfo Arruabarrena tiene la gran chance de terminar el año con la obtención de dos títulos.
Lejos del brillo, Boca jugó un partido inteligente, sabiendo que tenía material para doblegar a su rival, pero sin enloquecerse. Esa tranquilidad llevó al equipo a aprovechar al máximo las situaciones de gol que tuvo para tener en la efectividad a su gran aliado. Primero fue con Nicolás Lodeiro, que ejecutó a la perfección el penal que sufrió Meli para abrir el marcador. Después fue con el capitán Tevez, que hizo una de potrero para sellar un 2-0 que terminaría siendo definitivo.
No hubo paridad. Boca jugó con inteligencia cuando debía y, ya estando arriba en el marcador, tuvo momentos en los que se floreó y pudo golear. La contra parte fue Lanús, que confundió agallas con exceso de vehemencia y sólo mostró una faceta nervioso, de juego brusco y sin ideas. El ejemplo más claro quedó en las dos expulsiones que sufrió el Granate tras la grosera patada de Gómez a Tevez y la infantil acción de Fritzler frente a Lodeiro que prácticamente obligó a Laverni a sacarle la roja. Quedó claro: en el duelo de entrenadores Arruabarrena también le ganó a Guillermo.
El adversario de la final se decidirá este mismo viernes en el duelo que disputarán Rosario Central y Racing. Todavía no se sabe cuándo será la fecha de éste encuentro decisivo, pero lo importante es que Boca está ahí con la ambición ferviente de poder volver a gritar campeón.
