Campuzano se va y Molinas se queda

Te contamos todos los detalles detrás de dos noticias claves para el único grande.

Se terminó el mercado de pases en Europa y con ello la chance de que Boca se desprenda de futbolistas. Pese a eso, sobre el cierre se dieron dos situaciones que terminan siendo positivas para el Xeneize: la salida de Jorman Campuzano y la continuidad de Aaron Molinas.

Jorman Campuzano era uno de los tres jugadores que Boca tenía que intentar no perder junto a Agustín Rossi y Agustín Almendra. Esto tiene que ver con que este grupo de futbolistas vence su contrato en junio del 2023, a partir de enero pueden negociar sin dejarle nada al Xeneize. El colombiano terminó partiendo a Turquía para jugar en el Girensupor de la Superliga de aquel país. La transferencia se hizo a través de un préstamo con cargo,  por un año y con opción de compra de 1.700.000 euros por la mitad del pase.

Para poder irse, Jorman Campuzano renovó su contrato con Boca hasta diciembre del 2025, por lo que si regresa a la institución será con vínculo y sin peligro de quedar libre. Esta transferencia le permite al Xeneize liberar un cupo extranjero para la próxima temporada y también darle lugar a Ezequiel Fernández, volante que regresará de Tigre en diciembre.

Ya resuelto lo de Campuzano, ahora Boca tiene que ver qué sucederá con Agustín Almendra y Agustín Rossi. Mientras que el juvenil parece estar negado a renovar, lo que obliga al club a venderlo como sea antes de enero, el arquero ha declarado que sí quiere seguir en la institución. Claro, más allá de sus palabras, hasta el momento sus exigencias económicas han sido muy elevadas, y por propias declaraciones públicas de su representante, pidiendo 20 millones de dólares por cuatro años.

Por otro lado, Aaron Molinas junto al Consejo de Fútbol decidieron desistir del préstamo al Gil Vicente de Portugal y el juvenil volante se quedará – al menos – hasta terminar este semestre.