Clasificación y Revancha

Enorme partido de los dirigidos por Falcioni. Boca ganó por dos a cero con goles de Cvitanich y Sánchez Miño. Con este resultado el Xeneize ya clasificó para los Octavos de final de la Libertadores. 

Se jugó como una final. Desde los primeros minutos vibraba la tensión en cada choque. Los dos equipos intentaban presionar sobre el otro, era un duelo físico y psicológico. Boca intentaba lastimar con sus delanteros y la llegada de Ledesma o Clemente. El Fluminense atacaba por las bandas  tratando de terminar siempre con Fred. El partido se volvió una batalla de ajedrez en la que cada entrenador observaba como hacer que su táctica triunfe.

A la espalda de Schiavi y Roncaglia aparecía Fred o Carlinhos y traían dificultadas para Boca. Por el otro costado Clemente sufría con la velocidad de Wellington Nem. Erviti comenzó a jugar un enorme partido cerrandose para cubrir al tres Xeneize y siendo el emblema de la presión. Insaurralde fue un bastión en Boca, quitando todo de arriba o de abajo, intentando jugar siempre que pudo desde el fondo y reventando cuando hubo que hacerlo. Chávez, Erbes y Ledesma aportaban sacrificio, pero también alternaron malas decisiones cuando tenían el control de la pelota.

Boca dependía de sus delanteros para tener la pelota, los dos tienen una gran capacidad de pivoteo y control del balón ante una marca. Provocaban tenencia y creaban situaciones de peligro casi de la nada, así llegó el primer gol. Schiavi rechazó en largo, Silva aguantó ante Euzebio provocando que el central cabeceé incomodo para atrás. Como un rayo cortó por el medio Cvitanich, soportó la embestida de Diguinho, y definió con clase ante la salida de Cavallieri, gol y locura Xeneize. Era un partido complicado, pero el equipo de Falcioni logró imponer su estrategia y minimizar las opciones del rival. Orion fue clave en dos atajadas a Fred, siempre a espaldas de Roncaglia, al principio y al final de la primera parte. Vital lo del arquero.

Los primeros 15 minutos del complemento tuvieron a Boca muy tirado atrás y sufriendo la embestida del Fluminense. El árbitro ayudó a que esto ocurriese no midiendo de la misma vara las infracciones. Además el Xeneize no tenía la inteligencia, ni la paciencia, para atacar. Siempre intentó usar el contra ataque como arma, es cierto que el equipo brasilero estaba muy adelantado y dejaba espacios. La verticalidad constante, sumada a los nervios, no ayudaba a que Boca fuera preciso, y esto generaba que la pelota volviese muy rápido a las pies del tricolor carioca.

Una rafaga de Deco, algún desborde Carlinhos o Wellington, la jerarquía de Fred, eran todo lo que tenía el local para atacar, Thiago Neves casi ni apareció. Por momentos se sufrió, pero nunca por chances realmente peligrosas.En Boca  Creció Roncaglia y Schiavi.Insaurralde y Orion mantuvieron su gran nivel. En ataque el Xeneize se apoyaba en Silva y Cvitanich, pero Chávez, ni Ledesma era de mucha ayuda. La pelota parada estuvo presente en ambos equipos, ninguno la supo aprovechar, eso es un buen augurio para el equipo de Falcioni en lo defensivo, aunque se notó la ausencia de Román y su pegada para hacer valer cada tiro libre o corner.

Fred salió lesionado y en su lugar entró Rafael Moura, aquel delantero que brilló el Goias. Por su parte en Boca ingresó Mouche y Sánchez Miño, por Cvitanich y Erviti, dos de los mejores jugadores de Boca.

En la primera jugada que el Xeneize se tomó su tiempo llegó el segundo gol. Conectaron Mouche con Ledesma, luego Silva con Pablito. Se pensó, hubo pausa, inteligencia. Falcioni debe haber sonreido, se conectaron sus dos suplentes para el segundo gol. Centro del punta y Sánchez Miño por atrás de todos convirtió un golazo.

Fue un golpe anímico para el Fluminense. Boca dominó el partido y sólo tuvo un momento de distracción. Un pelotazo en el que Wellington se le fue a Schiavi y el central hizo un penal que pudo haber evitado. Rafael Moura se paró enfrente de Orion, remató a la izquierda del arquero y el uno tapó de forma brillante. Enorme partido del ex- San Lorenzo.

Con esta victoria Boca clasificó a Octavos de Final. El miercoles que viene jugará frente al Zamora en un partido que sólo importará para ver si clasifica primero o segundo en el grupo. Además empató el historial contra el equipo de Brasil (2 victorias, un empate y dos derrotas) y le quitó un invicto de 31 partidos internacionales.