De otro partido

Boca Juniors le ganaba justamente a Argentinos Juniors en la Bombonera pero, al no poder marcar un segundo tanto, el equipo de Borghi empató el partido con un zapatazo de Pisculichi que nadie preveía. Una nueva chance desperdiciada para acercarse a la cima, que ahora quedó a cuatro puntos.

Un remate increíble dejó a Boca sin su tercer triunfo consecutivo. Leonardo Pisculichi clavó un golazo sobre el cierre del partido en el primer tiro al arco de su equipo en todo el partido y le sacó al Xeneize la chance de quedar a dos puntos de los líderes del campeonato. En el merecer el ganador era el Xeneize, pero el fútbol vive de la efectividad en las áreas, y ahí el Bicho rescató un punto inesperado.

El empate dejó un gusto amargo por ser tan sobre el final. Pero a nivel juego es muy rescatable lo que dejó Boca en la primera mitad del encuentro, en la que llevó las riendas del juego y generó varias chances para ponerse en ventaja. El gol de Gigliotti aportó justicia y tapó los fallos arbitrales de Abal que perjudicaron al equipo de Bianchi con un penal no sancionado y un offside inexistente del Puma cuando se iba derecho al gol.

En la segunda etapa todo cambió cuando Acosta debió ser reemplazado por una molestia y Riquelme se cansó. El equipo entró en una meseta de 15 minutos y Argentinos respiró. Aún así, Sánchez Miño, Gigliotti y los defensores en la pelota parada tuvieron claras oportunidades de cerrar el partido con un 2-0. La falta de efectividad, y un gol de otro partido por parte de Pisculichi, le sacaron a Boca un triunfo que debía ser suyo por juego y actitud.

Ahora la punta quedó a cuatro puntos, aún se puede pelear este tan irregular campeonato. Pero primero habrá que pensar en Quilmes y luego en River…