Boca Juniors derrotó a Independiente por 3-1 en La Bombonera y ahora piensa en River Plate por la Copa Sudamericana 2014.
Con coraje, casi como si fuese una final por el título y no un partido previo al gran objetivo del semestre. La Bombonera fue sede de un nuevo triunfo de Boca por sobre Independiente, el equipo de Rodolfo Arruabarrena derrotó por 3-1 al de Sergio Almirón gracias a los goles de Jonathan Calleri (doblete) y de Emmanuel Gigliotti. Tras este triunfo, que infló el ánimo y sirvió para cuidar piernas, el Xeneize piensa en River.
Una enorme presión de Jonathan Calleri generó un error del arquero Rodríguez y el primer gol de Boca. Sí, apenas comenzado el partido, más con el corazón que con buen juego, el Xeneize se ponía en ganador frente a un Independiente que pensaba que venía de paseo a La Bombonera.
Tras el gol llegó lo mejor de Boca. Adrián Cubas se erigió como figura por su recuperación y calidad del pase. También Calleri, que se cansó de pivotear frente a los centrales para generar juego para sus compañeros. Por si fuera poco, cuando Independiente llegaba, chocaba con el gran trabajo de Pérez y de Trípodi, que jugaron concentrados y enfocados en dejar atrás sus imágenes negativas.
El gol de Pisano sacudió a un Boca que no merecía sufrir el empate. Afortunadamente para el equipo de Arruabarrena, la infantil mano de Bellocq y su doble amarilla, hicieron que rápidamente el partido se incline una vez más a favor del Xeneize. Ahí, con espacios, llegó el gran pase de Cubas, la corrida de Carrizo y la asistencia del Pachi para el segundo de Calleri.
Sobre el cierre llegó un gran centro de Carrizo para que Gigliotti grite el suyo y para que Boca se vaya al Monumental con un 3-1 frente a Independiente.
De una paternidad a la otra, porque el juves, cueste lo que cueste, el jueves hay que ganar.