El delantero recibió las provocaciones de todo Estudiantes, pero se fue ganador, con un gol suyo y un gesto que le duele a todo el Pincha.
Daniel Osvaldo se recibió esta tarde de un maestro del fútbol argentino. ¿Por su fútbol? No, por cómo superó las constantes provacaciones de un Estudiantes que fue a buscarlo desde el primer momento del partido. El delantero reaccionó con personalidad, con participaciones decisivas en los dos primeros goles del equipo con un pase y una definición certera.
Sin dudas que la curiosidad de la tarde pasó por el gesto que le realizó a Desábato, su principal provocador, al que trató de burro al ofrecerle pasto para que coma.
Los insultos de Desábato, el codazo de Damonte fueron estériles. No hubo dudas, fue goleada de Osvado ante los provocadores de Estudiantes.