Como siempre, Diario Xeneize te muestra los puntos a tener en cuenta que pueden definir o desequilibrar el próximo partido de Boca.
Presión: San Martín vive un momento de gran incertidumbre y presión. El promedio lo tiene contra las cuerdas en la lucha por la permanencia en la Primera del fútbol argentino. A esta altura del Torneo Final, una derrota comenzaría a ser el principio del fin. Es una batalla importantísima desde lo numérico como en lo anímico para los sanjuaninos. ¿Podrán?
Juventud: Boca presenta un equipo con gran futuro para enfrentar este presente. Carlos Bianchi llegó y demostró que una de las grandes diferencias con el ciclo anterior son la utilización de los juveniles. El Virrey confía, y mucho, en ellos. Es por eso que mañana estarán en cancha, o en el banco, algunos de los proyectos más interesantes como son: Castillo, Palacios, Bravo, Sánchez Miño, Colazo, Fernández y Magallán.
Espacios acotados: el partido finalmente no se jugará en el estadio del Bicentenario, y sí se disputará en el Hilario Sánchez. Una cancha que tiene dimensiones más pequeñas dentro y fuera del campo. San Martín prefiere ganar menos dinero en recaudación para poder tener más ambiente a su favor. Lo deportivo por sobre lo económico en esta difícil situación del Verdinegro.
Manos de acero: Oscar Ustari tendrá una nueva oportunidad de dejar en claro que tiene todo para ser el arquero de Boca Juniors por varios años. Lamentablemente para él, Agustín Orion está en un gran nivel, lo que lo aleja de la titularidad. Igualmente, él sabe que tiene otra chance de mantenerse como un contrincante de nivel para quedarse con la «Uno».
Volver al futuro: Santiago Silva y el Burrito Martínez han logrado en el pasado conformar una de las mejores duplas de ataque que ha tenido el fútbol argentino en el último tiempo. Bianchi confió en poder recuperarlos y trajo al ex Corinthians como un refuerzo estrella en este semestre, mañana tendrán otro partidos juntos. ¿Volverán a conectarse como en antaño?
