Boca derrotó por 1a0 al fluminense, con gol de Pablo Mouche a los 6 minutos del 2° Tiempo. El conjunto Brasilero terminó con 10. La revancha será el Miércoles a las 19.45 hs Boca hizo lo que tenía que hacer. Falcioni ya había avisado «Hay que ganar, no importa si es por la mínima diferencia». Ahora, habrá que ir a Brasil a defender el resultado. El partido será diferente a este, seguramente.
Los primeros 20 minutos, el Flu sorprendió a todos, presión bien arriba, marcas rigurosas que a Boca lo hacía poner fastidioso e impreciso. Luego, el Xeneize empezó a circular el balon y a adueñarse del partido. Empezaba a convertise en figura el arquero Brasilero Diego Cavallieri. Cada pelota se disputaba como si fuese la última. Boca tuvo a un Mouche veloz, luchador y peligroso, pieza fundamental para el triunfo.
A los 33 minutos de la primera etapa, el conjunto brasilero se iba a quedar con 10 hombres. Carlinho corta una jugada de peligro con la mano y por doble amarilla se fue al vestuario. A partir de ahí, todo fue de Boca. Que buscaba y buscaba pero se topaba con un arquero iluminado.
En la última jugada de esta etapa, corner para el flu y aquí la jugada polémica, Anderson cabecea y pega en la mano de Roncaglia, para nosotros sin intención. Acierto del árbitro colombiano.
En segundo tiempo, un cambio táctico fundamental: Blandi por Erbes. Boca iba atacar con todo, poniendo en cancha 3 delanteros. Cvitanich mas suelto y Blandi haciendo el trabajo sucio.
Gran acierto de Falcioni, por que Dario más suelto iba a habilitar a Mouche, para que éste, a los 6 minutos, defina perfectamente ante la salida de Diego Cavallieri y ponga el gol tan buscado. Boca ganaba 1a0 e iba por más.
Cada pelota que tocaba Román cerca del aréa, era medio gol de Boca. Pero como por abajo no se podía, capaz que por arriba sí. Pero tampoco se pudo. El Flu estaba en su noche de suerte, con una gran actuación de sus centrales, despejaban cualquier centro que caía al aréa.
Se acaba el tiempo, y con un latigazo Román casi agranda el marcador. Pasó cerca.
Faltó claridad, gran mérito del rival, que si con 11 esperaba, con 10 mucho más. Boca ganó. El objetivo se cumplió. El miércoles en el partido de vuelta, a matar o a morir.
