Boca pasó por arriba a la Universidad de Chile en una Bombonera encendida. Ganó por 2 a 0, pero pudo haberlo hecho aún por uno o dos goles más. Los goles fueron de Silva y Sánchez Miño, todo el equipo jugó en un gran nivel. La vuelta será el próximo jueves y la ventaja ilusiona.
¿Experiencia? ¿Oficio? ¿Qué más se puede decir de este equipo? 36 partidos invicto, campeón, puntero, finalista de la copa Argentina, bailando a un gran equipo en la semifinal de ida. No hay forma de discutirlo, aún si no obtiene ningún título, Boca es uno de los mejores equipos que ha dado el fútbol sudamericano en los últimos años. Sobrio, firme, con mucha personalidad, inteligencia, jerarquía, talento, actitud. Cuando más lo cuestionan este conjunto sube la apuesta y calla cualquier voz disidente. Aplaudan señores, y disfruten del show.
La Bombonera estrenó un nuevo look, luces exteriores que le dan una imagen renovada, moderna, europea; Lo que no ha cambiado es el fervor, la pasión, el calor y la pasión que inunda el estadio. Cuando faltaban dos horas para empezar el partido la cancha ya se encontraba en un 90% de su capacidad, la gente le aportó el calor y su aliento desde muy temprano. Apareció la niebla, se le sumó el humo de las bengalas y de los fuegos de artificio; no hubo nada que pudiese tapar la enorme actuación de Boca Juniors en otro partido tan fundamental.
Cuando los equipos salieron al campo de juego estalló el Alberto J. Armando, otra vez latió el templo del fútbol para abrazar a cada uno de los guerreros que se vestían con la gloriosa azul y oro. De entrada quedó en claro quién sería el líder del partido. El capitán Riquelme ya había avisado que dependería de Boca cómo jugaría el equipo chileno, y en su sabia lectura de juego, volvió a quedar claro que sus palabras no podían ser más certeras. El equipo de Falcioni minimizó las virtudes de la U de Chile, y aprovechó cada error del rival para lastimar.
El visitante se destaca por ser un conjunto rápido, de técnica, que busca salir velozmente hacia el arco enemigo, pero que sufre muchísimo en defensa. Presionado agresivamente sobre la salida, achicando espacios, siendo muy prolijos en las coberturas, jugando más vertical que horizontal; así fue que poco a poco logró meter a los trasandinos dentro de su arco y convirtiendo por medio del Pelado Silva el primer grito del juego. Fue fundamental la recuperación de Mouche y su posterior centro, demostrando la atención y determinación que tuvo Boca para ganar.
Sólo con un tiro libre que Orion atajó con seguridad y alguna aproximación fue lo que durante todo el encuentro que los visitantes hicieron para lastimar al Xeneize. Esto habla en claro de lo que fue la actuación brillante de Boca, maniató a uno de los equipos más ofensivos de los últimos años, lo dejó como un conjunto impotente de ideas, de fútbol, sin profundidad, ni peso en el área.
Erviti jugó un primer tiempo errático, le costó encontrar su lugar y leer los movimientos de los volantes, en la segunda mitad la descoció. Siempre bien ubicado, generoso para recuperar, con mucha energía para pisar la zona vulnerable de la visita. Entre sus jugadas más destacadas está el segundo gol. Picó al vacío y recibió una asistencia deliciosa del 10, remató al arco y se encontró con una buena atajada de Herrera, pero en el rebote, llegó Sánchez Miño para el segundo gol. Gran dupla conformaron en la segunda etapa los dos zurdos.
Schiavi jugó un partido para callar cualquier rumor sobre las dudas que tienen algunos personajes del mundo Boca para firmar un nuevo contrato. El central está apunto de cumplir 40 años, pero jugó con un nivel de excelencia contra un equipo que se destaca por atacar mucho y tener jugadores técnicos y veloces. El central cerró todos los caminos, sobre todo el aéreo, y teniendo otra actuación consagratoria.
Riquelme apareció en los mejores momentos del equipo dejando toda su calidad en la cancha. Asistió a Silva provocando una enorme estirada del portero chileno, a Erviti en el segundo gol, y muchas pinceladas dignas de su calidad de crack. En su cerebro tiene un mapa que le muestra la ubicación de cada jugador, pero además en su cuerpo tiene almohadones que adormecen la pelota en sus músculos sin importar la dificultad a la hora de dominar el balón.
Este resultado deja a Boca con una gran oportunidad de jugar una nueva final continental, para eso deberá ganar, empatar, perder por un gol, o perder por dos pero habiendo marcado un gol al rival. No hay nada dicho, del otro lado hay un equipo que juega muy bien y merece ser respetado, justamente por eso, es que se debe festejar este partido con gran alegría. Al menos por un rato, el domingo tenemos otra final que atender.