Hace una década Boca Juniors sumaba su última Copa Libertadores de la mano de una actuación nunca antes vista por un futbolista en este continente.
Hace 10 años Juan Román Riquelme llevaba su idolatría a otro nivel, convirtiéndose de manera contundente en el mejor futbolista de la historia de Boca Juniors. El enganche coronó con un doblete una actuación nunca antes vista en la Copa Libertadores, logrando así darle la sexta al club de sus amores frente a Gremio y en Brasil.
Cuando arrancó el 2007 pocos se imaginaban que ese año contaría con el regreso de Juan Román Riquelme. Miguel Ángel Russo era elegido como el entrenador para suplir el fallido intento de Ricardo Lavolpe, quien hundió ese gran equipo que había armado el Coco Basile antes de irse a la Selección. El dolor seguía latente por la final perdida con Estudiantes, pero el retorno del 10 regresaría la esperanza a la mitad más uno.
En apenas cuatro meses Riquelme disputó once partidos en la Libertadores 2017 anotando 8 goles, de los cuales 7 fueron en los mano a mano. Además, Román ayudó al equipo a pelear el campeonato local hasta el final, en un torneo que no se ganó por tener que rotar en momentos clave cuando se complicaron algunas llaves de la Copa como contra Cúcuta o Libertad.
Si bien aquel equipo de Boca tenía jugadores del calibre de Ibarra, Palermo, Palacio, Clemente Rodríguez, Cata Díaz o Battaglia, el nivel de Juan Román Riquelme fue tan elevado que opacó al resto de sus compañeros. La influencia del enganche, tanto en la construcción como en la finalización de las jugadas, lo transformó en el futbolista más desequilibrante que se vio a lo largo de una edición completa de la Libertadores.
Un gol en la ida, dos en la vuelta y la generosidad para darle a Palermo un penal que le hubiera dado a él un triplete histórico en una final. Riquelme fue el líder de un Boca que rompió los mitos contra un equipo brasilero, humillando al Gremio con un global de 5-0 que le dio el título al Xeneize.
Russo formó un equipo ofensivo, con un arquero de buen juego de pies como Caranta, centrales rápidos como Cata y Morel, laterales de ataque como Ibarra y Clemente, un 5 de juego puro como Banega, volantes con llegada como Ledesma y Cardozo, una dupla temible arriba como Palermo y Palacio. Todos tuvieron su mérito, pero el plus, el salto de calidad y el principal responsable del título fue Juan Román Riquelme.
Pese a Román, la falta de pretemporada como equipo y la propuesta tan ofensiva, llevó a que se fuera de menos a más el nivel colectivo. Boca sufrió en la fase de grupos, teniendo que golear en la última jornada a Bolivar para pasar a los mano a mano. Luego padeció la vuelta con Vélez y Libertad – como visitante – en octavos y cuartos. También la semifinal, en una noche de neblina y épica en la que La Bombonera ayudó a eliminar al Cúcuta. Ya en la final, todo el grupo exhibió su mejor versión para dar una cátedra de fútbol y peso copero.
Hace 10 años Boca ganaba su última Copa Libertadores, la del mago, la de Román.
El paso a paso de Boca en la Copa Libertadores 2007:
Fase de grupos:
Partido 1, Bolivar de visitante: 0-0
Partido 2, Cienciano de local San Lorenzo: 1-0 (Ibarra)
Partido 3, Tolucal de visitante: 0-3
Partido 4, Toluca de local en Vélez: 3-0 (Maidana, Riquelme y Boselli)
Partido 5, Cienciano de visitante: 0-3
Partido 6, Bolivar de local en Vélez: 7-0 (Palacio con doblete, Palermo, Tordoya en contra, Dátolo y Marioni con doblete)
Fase de mano a mano:
Octavos contra Vélez:
Ida: 3-0 (Riquelme, Palermo y Clemente)
Vuelta: 1-3 (Riquelme)
Cuartos contra Libertad:
Ida: 1-1 (Palermo)
Vuelta: 2-0 (Riquelme y Palacio)
Semifinal ante Cúcuta:
Ida: 1-3 (Ledesma)
Vuelta: 3-0 (Riquelme, Palermo y Battaglia)
Final contra Gremio:
Ida: 3-0 (Palacio, Riquelme y Patricio en contra)
Vuelta: 2-0 (Doblete de Riquelme)
Nicolás
20 junio, 2017 at 13:10
Como olvidar….. gracias 10. Nada ni nadie nos va a borrar esos recuerdos. Se te extraña muchísimo. Ahora que no jugas uno valora más ese tipo de jugador, antes era normal verte tirsr esos pases esos tiros libres ahora me doy.cuenta de que uno cada miles lo pueden hacer.
PROHIBIDO OLVIDAR A RIQUELME.