El delantero habló por primera vez sobre sus sensaciones de llegar a Boca Juniors. Remarcó la importancia de Bianchi, Riquelme y de la Bombonera.
Fue una extensa negociación en la cual, durante muchos momentos, la incertidumbre apareció en el aire para ponerle dudas a la concreción del pase. Emmanuel Gigliotti hoy respira tranquilo y habla por primera vez como jugador de Boca, porque si bien no firmó el contrato, lo hará en horas y nadie detendrá ya su sueño. Sobre todo esto, habló en 90 minutos Fox:
Estaba fastidioso por todo lo que pasaba que no podía disfrutar de lo que uno sueña desde que es chiquito, que el club más grande te quiera.
El Puma relató cómo fue paso a paso la posibildiad de ser hoy jugador de Boca:
Yo estaba bastante decidido con ir a México, porque es un club grande de esa liga. Económicamente era importantísimo, porque eran números que no había visto en mi vida. Pero todo cambió cuando me llamó Bianchi. Que el técnico más ganador de la historia del fútbol argentino te quiera…Fue raro, me puso nervioso cuando me llamó. Me dejó un mensaje de voz, que yo en realidad no los reviso, y a los dos tres días me enteré que me venía llamando. Su pregunta fue simple: ¿querés jugar en Boca?. Toda la vida soñé esto. Que me toque a mí es increíble.
Ante la consulta de la diferencia de dinero, expresó:
Las decisiones las tomo en base a lo futbolístico y lo que me hace feliz. Es raro que hoy un jugador no piense por lo económico, pero yo sigo decidiendo por lo futbolístico.
Sobre si alguna vez dudó de si había elegido bien, contó:
Cuando surgió lo de Boca, por más de las trabas, yo no estaba arrepentido de dejar pasar lo de México. Yo estaba convencido de mi decisión.
Gigliotti también habló de otros temas, como de Palermo, una referencia obligada:
Claro que lo vi jugar a Palermo. Con hacer el 3% de sus goles me conformo. Es un montón, je. A mí me tocó ir a Colón y que todo el mundo me hable del Bichi. Como Palermo en Boca son irremplasables.
De Riquelme:
Con la capacidad que tiene Román, uno se ilusiona. No creo que haya un delantero del fútbol mundial que no quiera jugar con Riquelme.
¿Es una ventaja jugar en un equipo grande a la hora de tener chances de gol?
No tenés más situaciones por estar en un club grande. Hoy el fútbol está muy parejo.
La Selección Argentina:
Yo pensé que ir a Boca me podía acercar a jugar el Mundial.
Su experiencia en el ascenso (en Lamadrid y All Boys):
Jugué en todas las categorías menos en la D y en la B Metropolitana.
Jugar ante River:
Pensé en el Súper y meterle un gol a River. Pero Boca es mucho más que ganar un sólo partido.
La Bombonera:
Como se vive en la Bombonera, no se vive en ningún lado. La gente se te viene encima, jugar ahí es una gran ventaja.
El peso de la camiseta:
Ya me siento preparado para jugar en Boca. Si le tuviera miedo a la presión, me hubiera ido a México.
La pelea por el puesto con Blandi:
Tengo que ganarme el puesto. Que me llamara el técnico no significa que me va a dar la camiseta y voy a jugar.
