Boca Juniors perdió en su debut en el Torneo de Transición con Newell’s en la Bombonera. La gente estalló de bronca contra Angelici por la salida de Riquelme luego de que terminara el encuentro. Sin el 10, los hinchas también se mostraron más fastidiosos de lo común cuando los jugadores se equivocaban. ¿Lo peor? El gol de la derrota lo anotó un juvenil llamado Tevez.
Un comienzo de esos que duelen y atentan contra la ilusión. Boca Juniors jugó muy mal y cayó ante Newell’s por 1-0 en la Bombonera. Como si fuera una cruel broma del destino, el único gol del partido lo anotó un juvenil que debuta llamado Tevez. El chico, de 17 años, reconoció cuando terminó el partido, y como para que todavía duela más, que él «nunca le suele pegar al arco».
Apatía, previsibilidad y mucho desencanto. Las ganas de Federico Carrizo no alcanzaron para despertar a un plantel que hace rato vienen jugando mal. Tácticamente Boca sufrió por las características que planteó el Virrey en su mediocampo. Erbes no explota por la banda en un 4-4-2, Gago mostró escasas muestras de su talento y Bravo quedó expuesto ante la ausencia de Riquelme a la hora de distribuir la pelota.
El partido se rompió cuando Juan Manuel Martínez no aprovechó una pésima entrega de Coty Fernández en el fondo. Esa poca capacidad del delantero para atacar sobre el error le terminó saliendo carísimo a su equipo, ya que en la siguiente acción, en una jugada idéntica, Mauricio Tevez convirtió luego de que Hernán Grana entregara mal una pelota. Boca sigue sufriendo su falta de eficacia a favor y en contra. La nula claridad ofensiva siempre se trasluce en goles para el rival.
En el complemento aparecieron más caras nuevas con el ingreso de Chávez, Fuenzalida y Castellani; ellos se sumaron al aire fresco que había aportado Carrizo. Si bien estuvieron lejos de tener una actuación brillante, con sus ganas desnudaron la falta de intensidad y fuerza mental por parte de aquellos que vienen jugando hace más tiempo en Boca.
Fue derrota. La gente no apuntó su bronca contra los jugadores ni contra el técnico, sí contra Daniel Angelici, al que pusieron como el principal culpable de la partida de Juan Román Riquelme. El diez – aún ausente – recibió su ovación, con su salida el equipo perdió su escudo protector, ahora las miradas son otras y Boca Juniors necesita una rápida reacción.
Aclo¿¿+¿0
10 agosto, 2014 at 20:56
Si que regrese Roman
Alicia Petersen
10 agosto, 2014 at 21:55
Me asusta ver mal al Virrey. Cuando hizo los cambios fue triste ver que no sabia a quien sacar!! Y si analizamos, saco 1º al que mejor jugaba. Aparte, no logra armar un medio campo que corte, recupere y genere futbol. La defensa hace agua porque el medio no para ni un taxi. Y ni hablar de Martinez y Giglioti: no tocan una pelota, no les llega una jugada. Roman cumplia gran parte de esa funcion, ya lo se. Pero el resto de los equipos tampoco lo tienen y generan juego. Que le pasa al DT? Es mi idolo y me asusta verlo asi.
Ariel
12 agosto, 2014 at 17:25
El problema son los muertos que el técnico pone cada partido, no tienen sangre, les da lo mismo ganar, perder o empatar, hasta que el técnico no se de cuenta que hay jugadores que no pueden siquiera ser suplentes esto no va a cambiar nunca y lo mas triste es que ese error lo viene cometiendo hace 20 meses. Y basta de Riquelme, hay vida después del 10, por favor.