Un enganche y mil esquemas

Te dejamos los detalles sobre cómo podría ser el parado táctico del flamante nuevo – y viejo – entrenador del Xeneize.

Esta tarde se presentó a Miguel Ángel Russo como nuevo director técnico de Boca. En estos días se supo, o trascendió, que la idea de Riquelme (Vicepresidente segundo y encargado del fútbol) era jugar en todas las categorías con enganche. Si bien, Mac Allister o Reynoso pueden cumplir esa función, en el plantel no hay un organizador de juego nato. A partir de esto surgen algunas dudas respecto al estilo de juego del DT en este segundo ciclo al mando del club: ¿Cuál es su idea? ¿Cómo podrá suplir el técnico una ausencia así? ¿Qué esquemas utilizó en sus experiencias como entrenador luego de su paso por Boca en 2007?

Miguel Ángel Russo ha mutado sus formas y utilizado distintos esquemas en su travesía deportiva en estos 12 años desde que dejó el cargo de director técnico de Boca. En Millonarios, donde fue campeón, potenció a sus delanteros llevando a Ayrton Del Valle a ser goleador del certamen y pasar al fútbol mexicano luego de casi 10 años boyando por distintos equipos menores de  Colombia. A su vez, en Alianza Lima, catapultó a Kevin Quevedo a la selección peruana de futbol. Este talentoso y rápido extremo zurdo es una de las grandes promesas peruanas con tan sólo 22 años. La actualidad de Boca muestra que las grandes dudas pasan por la posición de centro atacante debido a las falencias físicas de Wanchope Ábila, y a las dificultades de Zárate para congeniar en el juego asociado del equipo. En cambio, Eduardo Salvio volverá a ser una pieza importante ya que siempre este DT ha potenciado y destacado a los jugadores desequilibrantes.

Por otro lado, Russo utilizaba en Boca un esquema con tres volantes de características ofensivas, Riquelme y dos puntas como Palacio (por todo el frente de ataque) y Palermo. En Millonarios (campeón), Rosario Central (ascendió a primera desde la B Nacional en 2013) y Alianza Lima, careció de un enganche clásico aunque recurrió a sumar mediocampistas de juego. En este contexto, Russo supo jugar con volantes interiores y un 5 retrasado de salida limpia como Nery Domínguez, extremos y un esquema flexible entre el 4-3-3 y el 4-5-1. En contrapartida, en Cerro Porteño, se lo vio utilizar dos delanteros centros y volantes por fuera que pisaban el área para abastecerlos en un 4-4-2.

Por lo tanto, el mediocampo de Boca, con mayores y peores rendimientos en el 2019, parece estar a la medida del Russo que recordamos de 2007. De todos modos, las altas y bajas del mercado que todavía no empezó a moverse, determinarán sus intenciones.

La mayor falencia del plantel esta en los laterales. Fabra se vislumbra como posible titular por las características ofensivas que son del agrado de Russo y del vice segundo, Riquelme. El lateral derecho es una incógnita y un puesto a reforzar de inmediato. Todos los equipos de Miguel Angel mostraron una preponderancia ofensiva de sus laterales.

Russo vuelve y es un técnico que sin enganche ha sabido adaptarse a mil esquemas. Ahora, con Román, seguramente busque seguir el mandato de esta nueva dirigencia que piensa en un proyecto integral del fútbol.