Connect with us

Editorial

Caravana de amor

Un grupo de hinchas de Boca Juniors se acercaron hasta la casa de Juan Román Riquelme para regalarle una camiseta y entregarle un libro con casi 14.000 firmas pidiendo su regreso. Diario Xeneize te cuenta en detalle cómo fue este homenaje al ídolo.

Leandro Romagnoli, el máximo ídolo que hoy tiene San Lorenzo, ingresaba desde el banco de suplentes para tratar de mantener una derrota digna ante el Real Madrid en el partido más importante de la historia de su club. A  miles de kilómetros, en Don Torcuato se encontraba él sentado en un sillón mirando por televisión un encuentro que él vivió hace 14 años, uno que lo convertió en leyenda del fútbol. A su vez, a unas cuadras de distancia, más de una centena de hinchas se acercaban a su casa a pedirle que vuelva al patio de su casa.

La estación de tren de Don Torcuato se encuentra en la zona norte de la provincia de Buenos Aires. Ahí se fueron encontrando diferentes hinchas que llegaron desde Banfield, Morón o Quilmes. El grupo presente abarcaba niños y también adultos. Hombres y mujeres. Todos con su camiseta de Boca o algún detalle de vestuario que representaba su pasión por Boca o por su máximo ídolo, Román.

La caravana por Riquelme se inició en la estación de tren, pero luego continuó por La Noche Disco, el boliche del hermano de Román, en donde los hinchas no pudieron encontrar a nadie a quién entregarle los regalos para el ídolo: una camiseta de Boca con su nombre y número que iba acompañada de un par de libros que recolectaban casi 14.000 firmas pidiendo su regreso al club.

Un encuentro de pequeñas historias, de hinchas reales que se juntaron con el único fin de demostrarle a su ídolo su apoyo y deseo de que vuelva. Personas de carne y hueso, como Toti, que hace unos meses se enteró de que fue profanado de su verdadero hogar en la época de la dictadura. Que recientemente descubrió que tiene un hermano en Rosario con el que están luchando por saber quiénes eran sus padres y hasta cuál es su verdadera edad. Él, en medio de su lucha personal, fue el encargado de poner dinero de su escueto bolsillo para hacer algunas remeras y banderas para que la caravana tenga eso que está buscando: identidad.

El recorrido siguió hasta la mismísima puerta de la casa de Román. Los hinchas dialogaron con la seguridad, preguntando si ahí se encontraba su ídolo, pero se encontraron con una respuesta negativa que volvió a generar un sentimiento colectivo de desesperanza. Todo cambió cuando en un auto llegó Chanchi, el hermano del enganche que se detuvo a hablar para ver si podía hacer algo. Tras unos minutos de haber ingresado a la casa, el otro Riquelme salió y se acercó para pedir que entre una persona en representación de todos los presentes. El elegido terminó siendo Ariel, que fue uno de los promotores de la caravana.

Las lágrimas de Fabiana y Aylen se mezclaron con los aplausos del resto al ver que salía Ariel de su encuentro con Riquelme. Temblando, pero con una sonrisa en su rostro, les pidió a todos que se reúnan para contarles lo que habló: «Román estaba sentado viendo fútbol, le di la camiseta y las firmas. Me miró y me dio un abrazo, estaba muy emocionado. Me pidió perdón por no salir, pero realmente estaba emocionado, lo golpeó, no estaba preparado para vernos».

La caravana por Riquelme cumplió con su objetivo de entregarle al ídolo un pedido para que regrese, avalado por casi 14.000 firmas, número que supera hasta los votos que tuvo Daniel Angelici para ser el presidente Xeneize. Pero lo más importante fue la unión, la búsqueda y la entrega de tiempo y energía de ese grupo de personas para darle un mimo desinteresado al jugador que tantas alegrías les dio. Ayer, en ésta pequeña historia, volvió a quedar demostrado la grandeza de los hinchas, la de Boca.

Mirá la galería de la caravana por Román:

5 Comments

5 Comments

  1. jorge

    21 diciembre, 2014 at 16:27

    Gracias gracias gracias de parte de toti

  2. Mati Olivera

    21 diciembre, 2014 at 16:50

    Buenisima nota Lucho, los que estuvimos presentes sabemos como fue todo, la espera, la intriga de qué iba a pasar, la ilusión cuando llegó Cristian, la desilusión de muchos después.. En fin, los regalos se entregaron y pudimos pasar una tarde de Riquelmistas todos juntos y eso es lo positivo de ayer.

  3. Aclo¿¿+¿0

    21 diciembre, 2014 at 17:25

    MUCHISIMAS GRACIAS Luciano Torres Toranzo ,te doctoraste de periodista .
    Pudiste reflejar los sentimientos colectivos y los personales ,de algunas personas muy queribles y valiosas.
    Fue un placer haber compartido con vos esta maravillosa experiencia.
    Roman lo vale y nosotros tambien,ojala Ariel Perez,pueda lograr que Roman lea la nota Roman.
    ROMAN: Te queremos ver en la bombonera y vos moris por hacerlo,pero sabemos que la dirigencia basura,lo impide…ambos esperaremos juntos,unidos por el amor.
    Espera junto a nosotros y nosotros a quitar las barreras.

  4. Fabiana

    21 diciembre, 2014 at 20:30

    Mejor contado no pudo estar, es bastante normal q lagrimee por este hombre que tan feliz me ha hecho con la camiseta de Boca durante muchos años, lo quiero mucho a Román y esta injusticia me hace daño, no solo por todos nosotros q lo necesitamos tanto sino tambien por el, porq se q lo está sufriendo y no se lo merece.

  5. pilin

    22 diciembre, 2014 at 18:39

    Gracias a todo el Grupo por lograr esto, aportando cada uno su granito de arena, desde todos los lugares de Argentina, y el Mundo! Gracias Ariel y Pablo!!!

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

More in Editorial