El Xeneize mostró toda su superioridad ante este combinado nacional y ya piensa en en lo que serán los próximos meses.
Boca Juniors apabulló a la Selección de San Luis por 4-0 y cerró con sonrisa este primer semestre del 2018. En una verdadera fiesta que solo sirvió de excusa para celebrar el bicampeonato, el Xeneize no tuvo reparos y le tiró la chapa a un conjunto improvisado que poco pudo hacer.
Maroni y diez más. El cordobés fue, como ante Talleres, el mejor jugador de Boca Juniors en este amistoso. Vertical, desequilibrante, fue el que tocó para el medio dejando solo a Bebelo Reynoso para que abra el partido y debute en la red con la azul y oro. Con los destellos de esta dupla el Xeneize se despidió del primer tiempo con solo un gol de diferencia.
En el complemento apareció Almendra. El pibe armó las jugadas para los goles de Bou y de Vadalá. También hizo estallar el travesaño con un remate que merecía ser gol. Antes, Lamardo también reventó el poste con un precioso disparo. Sobre el final, Wanchope aprovechó un error del arquero al rechazar y cerró la goleada.
Con el bicampeonato consumado y el pase a los octavos de la Copa Libertadores ya conseguido, Boca ahora descansará y buscará rearmarse para un segundo semestre en el que el sueño de la séptima de América y el tricampeonato nacional serán los desafíos.