La esperanza renace

El Xeneize ganó su segundo clásico consecutivo y quedó muy cerca del puntero del campeonato. La próxima fecha es el Súper contra River Plate.

Boca Juniors tuvo una de sus mejores actuaciones en el semestre. El nivel no solo fue alto por lo que generó el equipo, sino porque enfrentaba a un grande como Racing que llegaba afilado tras golear a Independiente y con chances de pasar al Xeneize en la tabla si vencía en La Bombonera. Todo ese contexto exalta el brillo que demostró el conjunto de los Barros Schelotto, enseñando de a poco algo que se necesitaba: identidad.

Fernando Gago volvió a ser la gran figura de Boca. De sus pies llegaron las mejores recuperaciones, la paciencia para atacar con más eficacia y esos pases filtrados que él solo puede dar. Fue el 5 quien se vistió de arquitecto para construir una pared con Bou y luego asistir a Fabra para que se la pinche a Orion provocando el gol en contra de Insúa. El 1-0 es un ejemplo del ADN que Pintita le imprime al Xeneize con su fútbol.

Boca fue una aplanadora, atacando con voracidad a Racing hasta el punto de minimizarlo. Walter Bou, que debió reemplazar a Darío Benedetto, marcó el 2-0 tras una gran jugada colectiva que contó con una buena asistencia de Peruzzi. La Panterita tuvo también un mano a mano en esa etapa, pero definió al único lugar que no debía: al medio del arco donde estaba entregado Orion.

En el complemento el inicio fue idéntico al transcurso del primer tiempo, con Boca atacando y lastimando. Un remate de Tevez se desvió y, por lo lento que salió Racing del área chica, le quedó a Bou para definir de primera y poner el 3-0. La Panterita tuvo un buen partido, jugando para el equipo y anotando un doblete. Aún así, parece más cómo do cuando tiene que patear sin pensar tanto y a un solo toque, bajando en su eficacia cuando tiene que trasladar o debe pensar a qué parte ubicar el balón.

La incertidumbre llegó luego de que Tevez errara un gol increíble tras sacar a pasear a Orion, el 10 se confió al rematar débil provocando que Vittor se la saque en la línea. La falta de eficacia revivió a Racing, que tras suspirar al ver como Walter Bou le entregaba otro mano a mano al arquero, se puso en juego luego de un rebote corto de Guillermo Sara que Lisandro López no perdonó para el 3-2.

El nivel de Boca no podía permitir que Racing se robara un punto de manera injusta, es por eso que Gago volvió a aparecer con un pase brillante para Pavón, que perdió ante Orion, pero que generó el rebote que Tevez, tras engancharle dos veces a Sánchez antes de rematar, transformó en un golazo para el 4-2 final.

El Xeneize con el regreso de Gago y el cambio de sistema encontró su mejor versión, justo en dos clásicos y en la previa del choque contra River. Además, con el empate de Estudiantes, Boca quedó a dos puntos y es el único escolta del conjunto de La Plata. La esperanza renace, ahora el equipo debe mantener este nivel para la alegría de la mitad más muchos.