Como siempre, Diario Xeneize te muestra los puntos a tener en cuenta que pueden definir o desequilibrar el partido.
Simple: Bianchi es un técnico que busca que sus equipos se muevan lo más natural posible, para ello, intenta que cada jugador juegue en la posición en la que más cómodo se sienta. El Virrey siempre pone cada pieza en su lugar. Boca jugará con un clásico 4-4-2 en este partido en el que no hay un sólo futbolista que esté ocupando un puesto que no sea el suyo.
Renacer: el comienzo no fue el esperado por todos los fanáticos Xeneizes. El equipo no sólo no obtuvo resultados positivos, sino que tampoco logró tener una ideología de juego que le de una identidad al conjunto. Es momento de cambiar el chip como quiere el Virrey, para ser nuevamente un Boca sólido y ganador.
Ansiosa paciencia: el entrenador Carlos Bianchi pidió tiempo. Pero a su vez fue el crítico número uno del juego de su equipo. El hincha le tendrá siempre respeto por su trabajo al Virrey, aunque él, como todos los que conocen el mundo Boca, saben que hoy es una final importantísima para las aspiraciones de avanzar en la Copa Libertadores.
Inquietud: la vuelta de Pablo Ledesma despierta alegría. Es un jugador que ha demostrado en el pasado ser muy importante por su llegada al gol y su gran despliegue. Pero hace un año que el volante tiene un bajo nivel y problemas físicos que no lo ayudan a levantar. Hoy tendrá su primer partido oficial en este nuevo ciclo. Ojalá sea con un retorno futbolístico en su juego.
Cortar y lastimar: será muy importante interrumpir los circuitos de juego entre Arroyo, Días y Oyola. También es fundamental saber salir de contra, y cuando se pueda, aprovechar cada oportunidad de gol que se tenga. El Barcelona es un equipo que se destaca por tener una defensa bastante dura.
