Hacemos un análisis detallado del partido que disputó el juvenil lateral derecho en su primer partido oficial en primera división.
Nahuel Molina Lucero exhibió una gran personalidad en su debut oficial con la camiseta de Boca Juniors. Con apenas 17 años (6/4/98), arrancó de titular en una dura prueba que tuvo Boca Juniors frente a San Martín de San Juan y respondió con solidez. Pese al mal clima y los rumores de que una derrota podría marcar el fin de la era de Rodolfo Arruabarrena, él nunca se mostró nervioso y clausuró su zona como si fuera un experimentado jugador.
Si bien tuvo errores lógicos con la pelota, Nahuel Molina Lucero se destacó por nunca mostrarse nervioso ni condicionado por el contexto. A lo largo del partido tuvo un duelo personal contra Montagna, que si bien lo desbordó en dos ocasiones, fueron más las veces en las que el cordobés logró anularlo. Fue justamente en defensa donde más se destacó, teniendo un cruce clave para cortar un ataque de San Martín que pudo haber terminado en gol si él no aparecía. En ataque siempre fue una opción, tocando la pelota muchas más veces que Jonathan Silva, el lateral por la izquierda. Sus mejores intervenciones fueron cuando se juntó con Tevez, generando jugadas que, de manera directa o indirecta, terminaron siempre en oportunidades de gol para Rodrigo Bentancur.
Nacido en Córdoba (Embalse) arrancó en inferiores siendo delantero, pero de a poco fue retrasándose en el campo de juego hasta terminar convirtiéndose en lateral por derecha, puesto en el que es titular con la reserva de Rolando Schiavi. Él es el primero de los futbolistas que Boca Juniors incorporó de la escuelita del Barcelona a través de Coqui Raffo que llega al plantel profesional. Si bien debutó oficialmente anoche, había ingresado – como volante – unos minutos en la victoria por 3-0 del Xeneize ante Emelec con la que se abrió el año. Sí, con él en cancha el equipo logró sus únicas dos victorias en este 2016.
Con Leandro Marín cedido a Tigre, sumado a las lesiones de Gino Peruzzi y Leonardo Jara, e incluyendo los fallidos experimentos de Marcelo Meli o Daniel Díaz jugando de lateral por derecha, Rodolfo Arruabarrena recurrió a un juvenil que le demostró en cancha que puede confiar en él para batallar este momento. Nahuel Molina Lucero aprobó en su debut y éso no es poca cosa.
