Juan Román Riquelme pasó a visitar al plantel y le dijo a Daniel Osvaldo que estaba seguro que anotaría. El 10 sigue aportando desde afuera.
«Ni soñándolo», con esa frase contundente Daniel Osvaldo graficó cómo vivió su gran debut en Boca Juniors. El delantero cumplió con la noche que imaginó desde chiquito, esa en la que se veía jugando un partido copero en La Bombonera, con la camiseta azul y oro, y anotando el gol decisivo para el triunfo.
Pero si todo esto parecería ser más que suficiente para llenar el corazón de cualquier hincha Xeneize, Daniel Osvaldo además contó con un amuleto de lujo. Sí, en la previa recibió junto al resto del plantel la visita de Juan Román Riquelme, quien le aseguró que iba a marcar un gol.
«Román vino a la concentración y me dijo que iba a meter un gol. Para él también fue mi dedicatoria en el festejo», explicó Osvaldo al terminar el encuentro. Hay que recordar que el delantero reconoció que «Riquelme era su ídolo desde chico y que tenía el cuarto repleto de posters del enganche».
La primera vez que Osvaldo pudo conocer a Riquelme fue cuando lo enfrentó en un amistoso entre Boca y el Espanyol del Barcelona, club en el que él jugaba y que terminó llevándose un triunfo por 3-1 con dos tantos suyos. Goles que no celebró y que incluso pidió perdon. Tras el encuentro se acercó al vestuario y se llevó una foto y una camiseta de Román, cumpliendo uno de sus sueños.
Osvaldo años atrás junto a Riquelme. Hoy Román se transformó en su amuleto de suerte.
El retiro lo alejó de las canchas y todavía no quiere volver a La Bombonera para evitar algún conflicto o mal entendido. Pero Riquelme desde afuera sigue jugando para Boca. Mientras Osvaldo sigue viviendo el sueño del pibe: juega en el club de sus amores, se destaca, anota un gol y encima tiene a su ídolo tirándole una pared en forma buena suerte.
