Boca arrancó este martes la preparación para el partido contra Rosario Central del próximo domingo envuelto en un clima de alegría tras el triunfo en el clásico.
Distendidos y de buen humor, los jugadores salieron a la cancha a realizar ejercicios livianos pensando en recuperar los músculos luego de la batalla del domingo pasado en el Monumental. Con una sonrisa que aún perdura, tanto Riquelme como Gigliotti entrenaron a la par del grupo y bajo la tutela de Bianchi pese a haber tenido que ser reemplazados contra River por unas mínimas lesiones. Situación que no se pudo repetir con Gago (desgarrado) ni con Erbes y Zárate, quienes trabajaron aparte y en diferenciado junto a los otros futbolistas con molestias físicas.
Una de las grandes noticias del entrenamiento giraron en torno a la presencia de Diego Rivero como uno más del plantel luego de superar sus problemas cardíacos y físicos (tobillos). También estuvo presente junto a los suplentes Alan Aguirre, el juvenil que quedó fuera del clásico por un supuesto virus de paperas.
Con las ausencias de Gago (lesión) y Orion (Selección), más las dudas de Erbes y Zárate, comienza otra semana de mucho trabajo para Carlos Bianchi. Pero con la confianza y el ánimo por las nubes tras el triunfo en el Superclásico.