Como siempre, Diario Xeneize te muestra los puntos a tener en cuenta que pueden definir o desequilibrar el partido.
Efectividad: uno de los problemas que más ha demostrado Boca en los últimos partidos es la poca capacidad que tiene para aprovechar las situaciones de gol que se le presentan. Algo que se agrava cuando el rival sí lo hace, y más, cuando es con tanta precisión. Es una final, habrá que maximizar cada chance que aparezca.
En la espera: Nicolás Blandi siente un hormigueo en su cuerpo. Hoy es el centro delantero que más en forma aparece dentro del plantel de Boca. Si bien Carlos Bianchi le dará una nueva chance a Lucas Viatri, la no convocatoria de Santiago Silva, es una clara muestra de que el número 25 comienza a ganar la pulseada por ser el faro de área Xeneize.
Reaccionar: ¿Cómo jugará Nacional? ¿Atacará o esperará? Ambas situaciones presentas opciones favorables que Boca debería saber aprovechar para lastimar y llevarse un punto. Habrá que estar atento a la lectura del desarrollo de juego y reaccionar ante ella para buscar la llave de la victoria.
Intensidad: es importante que el equipo mañana demuestre una actitud que desborde a Nacional, que lo incomode, que le demuestre que enfrente hay un cojunto con gran hambre de gloria. La necesidad del triunfo obliga a este grupo a jugar en el Centenario en su mejor versión si es que quiere pasar de ronda.
Esperanza: Juan Román Riquelme, el ídolo que se fue haciendo creer que nunca más vestiría la diez en su espalda. Dueño de las hazañas más grandes en la historia Xeneize. La esperanza de levantar a un equipo en una situación crítica y trasladarlo al paraíso futbolístico. Una vez más, en la espera de lo que su ingenio pueda hacer para salvar a Boca de una parada bravísima.
