El equipo de Guillermo Barros Schelotto tuvo un inicio brillante en el a Superliga y confirmó que peleará por quedarse una vez más con el título.
Boca Juniors exhibió su cinturón de campeón de forma magistral frente a Olimpo. En La Bombonera, el Xeneize se floró al golear por 3-0 al bahiense gracias a los goles de Darío Benedetto (2) y Pablo Pérez. Con fútbol, inteligencia y jerarquía individual, el conjunto de los Mellizos confirmó que tiene todo para soñar con el bicampeonato.
Una primera piña rápida que aceleró el nocaut. Apenas iban 7 minutos cuando Gago envió un pase profundo para que Pavón, a la carrera y de primera, toque al medio para que Benedetto rompa la igualdad. Pipa definió a placer, confirmando que su amor con el gol de la temporada pasada no fue una cuestión de casualidad.
A partir del 1-0 el equipo mostró su mejor cara: juego asociado, pausa, tenencia, conexiones a dos toques y peligro en el área rival. Fue así, casi en un calco del primer tanto del encuentro, que Gago volvió a encontrar en profundo a Pavón para que él toque al medio, Benedetto la deje pasar y genere el espacio para que Pérez dispare para – con ayuda de un desvío en Nasuti – aumentar la distancia en el marcador.
En el complemento hubo un relajamiento natural, algo que llevó a Olimpo a un fallido intento por descontar, y a que el partido perdiera intensidad. Guillermo decidió levantar el ritmo con el ingreso de Espinoza, algo que reactivó al equipo para liquidar el encuentro. La acción clave fue la que protagonizó Cardona con un gran pase filtrado para Benedetto, que cuando iba a enfrentar al arquero enganchó ante el central que llegaba de atrás ganando un penal. Fue el propio Pipa quien lo remató con justeza, disparando cruzado y abajo para el 3-0.
Aún con la espera de ver qué puede aportar Nández, Boca se muestra sólido al mantener la base y ganar más fútbol gracias a los ingresos de Goltz y Cardona. El campeón se hizo presente y confirmó que su objetivo es volver a dar la vuelta.
