Una hincha de Boca Juniors falleció al salir de la cancha luego de ser atropellada por otro socio que intentó escapar y nunca intentó socorrerla.
El domingo pasado, luego del partido de Boca Juniors que terminó en derrota frente a Atlético Tucumán, Iara Sosa falleció al salir de La Bombonera. Ella se retiraba del estadio compartiendo una moto junto a su papá y, en la esquina de Patricios y Quinquela Martín, un Audi que cruzó en rojo y a contra mano, la embistió quitándole la vida. La letanía del servicio médico, lamentablemente algo tan común en nuestro país, tampoco ayudó a que la historia sea diferente.
La familia de Iara Sosa nos confirmó que el conductor del Audi es un empresario de apellido Santillán, que también salía de La Bombonera. Y que él, tras el choque, intentó fugarse; pero rápidamente la prefectura logró interceptarlo para que quede detenido hasta el día de hoy. Igualmente, ellos saben que es un delito excarcelable y que este hombre cuenta con mucho poder y abogados para prontamente quedar en libertad.
La familia lo que busca es concientizar para que ésto no vuelva a suceder. Su dolor más grande pasa por la actitud de Santillán, que nunca se preocupó por Iara Sosa, ni en el momento del choque ni en los días siguientes. El empresario no tuvo ningún gesto humano para con la familia, sea a través de sus abogados o de cualquier otro allegado suyo.
Iara Sosa, que el próximo sábado cumpliría 20 años, era una gran jugadora de handball, siendo seguida por la Selección. El deporte era su pasión, en especial Boca, que era lo más importante de su vida según nos contó su familia. Que se haga justicia.
